Nueva iniciativa cultiva liderazgo ministerial dentro de la población católica hispana en Estados Unidos

Por Maria del Pilar Guzman

BOSTON (OSV News) – A lo largo de los últimos años, los católicos hispanos han sido reconocidos como la población con mayor crecimiento en la Iglesia Católica de Estados Unidos, representando cerca del 71% del crecimiento de la población católica en el país desde 1960. Según el Pew Research Center, se estima que hay 63.7 millones de hispanos viviendo en Estados Unidos, de los cuales aproximadamente 31 millones se identifican como católicos.

Sin embargo, a pesar de que los hispanos representan más del 42% de los católicos en Estados Unidos, el número de hispanos nacidos en Estados Unidos que se dedican a servir a la Iglesia — ya sea como ministros laicos, religiosos y religiosas, seminaristas, sacerdotes y diáconos — ha permanecido relativamente bajo. Con el objetivo de aumentar el número de jóvenes católicos hispanos que sirvan a la Iglesia, oficinas diocesanas, teólogos, y educadores están explorando formas de invertir en esta población, con la esperanza de revitalizar los ministerios y la participación fiel en toda la Iglesia Católica de Estados Unidos.

Uno de estos programas es “Haciendo Caminos”, una iniciativa de cinco años que ayuda a apoyar la educación ministerial de posgrado de jóvenes católicos hispanos nacidos o criados en Estados Unidos, asignando recursos para inculcar un profundo sentido de vocación eclesial.

La primera reunión de las instituciones asociadas a Haciendo Caminos en Boston, que tuvo lugar en mayo de 2023. En colaboración con otras dieciséis instituciones, Boston College y la Universidad de Notre Dame participan en una iniciativa de cinco años para cultivar y apoyar la vocación al ministerio de los católicos hispanos nacidos y criados en Estados Unidos. (Foto OSV News/cortesía de Juan Miguel Alvarez, Haciendo Caminos)

“La idea será modelar lo que otras universidades, diócesis, y organizaciones podrían estar haciendo”, dijo el co-fundador de la iniciativa Hosffman Ospino, teólogo y educador en Boston College y director del Departamento de Educación Religiosa y Ministerio Pastoral. “Necesitamos crear una cultura de vocación dentro de la comunidad latina, y esta es una forma de hacerlo”.

Una visión de Ospino y Timothy Matovina, profesor de teología en la Universidad de Notre Dame en South Bend, Indiana, “Haciendo Caminos” es una asociación entre 18 instituciones católicas, hecha posible gracias a una subvención de $7.9 millones otorgada por la Fundación Lilly Endowment Inc., una fundación filantrópica privada.

Ospino dijo a OSV News que “Haciendo Caminos” ha desarrollado un sistema para conceder becas a estudiantes aceptados en programas de posgrado en teología o ministerio pastoral en sus instituciones asociadas. Además de Boston College y la Universidad de Notre Dame, estas instituciones son: la Universidad Católica de América en Washington; la Universidad de Fordham en la Ciudad de Nueva York; el Instituto de Teología Aquinas en San Luis; la Unión Teológica Católica en Chicago; la Universidad Loyola Chicago; la Universidad Barry en Miami; la Escuela Franciscana de Teología localizada en la Universidad de San Diego; la Escuela de Teología Jesuita de la Universidad de Santa Clara en California y sus programas de posgrado de ministerios pastorales; la Universidad Loyola Marymount y la Universidad Mount St. Mary en Los Ángeles; el Seminario St. John en Camarillo, California; la Universidad Loyola en Nueva Orleans; y la Universidad de Incarnate Word, el Colegio Católico Mexicano Americano, y la Escuela Oblata de Teología en San Antonio.

Como uno de los objetivos del programa es reducir las barreras y aumentar el apoyo financiero para los estudiantes de posgrado hispanos, se otorgan becas de hasta $30,000 que permite a los beneficiarios utilizar los fondos para pagar la matrícula y otras necesidades esenciales, como la vivienda, el cuidado de niños, y gastos relacionados con la salud.

“De esta manera, preparamos el camino para que estos estudiantes se concentren en sus estudios y, eventualmente, se unan a la vida de la Iglesia, sirviendo ministerialmente y, idealmente, sin deudas”, expresó Ospino.

Aproximadamente la mitad de los fondos se destinará a becas, mientras que el resto se utilizará para fomentar una cultura de vocación ministerial a través de una serie de programas e iniciativas. Por ejemplo, Haciendo Caminos invitó a cada institución asociada a crear una pequeña red de organizaciones, escuelas, y parroquias para apoyar a los estudiantes en sus programas.

Además del apoyo financiero que reciben los estudiantes mientras completan su maestría en una institución asociada, los becarios desarrollarán habilidades de liderazgo pastoral, conocerán a otros líderes católicos jóvenes latinos de todo el país, y se conectarán con mentores locales y compañeros ministeriales.

En adición, la iniciativa está planeando cumbres nacionales vocacionales para dar la bienvenida a personas que están terminando sus estudios universitarios de pregrado o que están considerando una formación de posgrado en ministerio para hablar sobre lo que significa ser un ministro en la Iglesia Católica. Por último, Ospino añadió que traer teólogos y líderes pastorales latinos como visitantes a las clases sería invaluable en la formación de los estudiantes, ya que pueden obtener un criterio sobre el ministerio y la teología desde una perspectiva latina.

Un joven latino que encarna el tipo de líder que Haciendo Caminos busca cultivar es Juan Miguel Álvarez, el director del programa.

Durante su infancia, hasta los 5 años, Álvarez recuerda que sus padres lo llevaban a él y a sus cinco hermanos en una gran camioneta y emprendían el viaje hacia el norte desde su Jalisco natal, México, hacia Estados Unidos. Una vez allí, la familia pasaba los veranos recogiendo pepinos y cerezas en campos de California y Washington. “Yo fui el único que no trabajó porque soy el más joven de seis, así que era el bebé de la familia”, manifestó Álvarez a OSV News.

Después, la familia de Álvarez se estableció en Colorado Springs, Colorado, lo que provoco grandes cambios en su vida, pero una cosa permaneció constante: su vivencia y práctica de la fe católica.

“La asistencia a Misa todos los domingos era innegociable”, expresó. “Era una forma de vida. Era lo que hacían mis hermanos, lo que hacía mi familia, y me sentía como en casa en la iglesia”.

Cuando Álvarez era adolescente, comenzó a leer sobre teología, motivado por el deseo de descubrir “por qué hacíamos lo que hacíamos y para explicarme a mí mismo y a amigos que me preguntaban acerca de la fe”, señaló.

Rápidamente, este interés se convirtió en una pasión por el estudio de la teología, y, deseando involucrarse en el ministerio, cursó estudios universitarios en la Universidad de Notre Dame. Se graduó en 2014 y luego se estableció en Chicago, donde trabajó en ministerio juvenil en parroquias y escuelas durante seis años.

Pero, según relató Álvarez, a diferencia de su experiencia creciendo en Colorado Springs, “donde había hispanos, pero no tantos”, las comunidades donde sirvió en Chicago eran “en su mayoría mexicanoamericanas, en su mayoría hispanas”, y fue allí donde fue testigo de la experiencia bilingüe y bicultural.

“Me di cuenta de que había muchos latinos aquí en Estados Unidos que crecían en este mundo”, manifestó. “Es casi como si hubieran traído un pedazo de México con ellos cuando vinieron a Estados Unidos y, culturalmente, viven muchas tradiciones mexicanas mientras hablan inglés y practican las tradiciones estadounidenses”.

Chicago actuó como un catalizador, ya que Álvarez se dio cuenta de que, con una formación adecuada, los latinos podrían servir ministerialmente en parroquias, hospitales, escuelas, y otros lugares, lo que lo llevó de regreso a la Universidad de Notre Dame. Allí, se inscribió en el programa de Maestría en Divinidad, terminando el posgrado en 2023.

Un día después de su graduación, fue nombrado director de Haciendo Caminos.

Álvarez señaló que el programa, que resonó en él no solo desde el punto de vista ministerial sino también personal, “ofrece líderes capacitados para el mañana, no solo para la Iglesia Católica Hispana de Estados Unidos, sino para la Iglesia Católica de Estados Unidos en general”. “Tenemos tantos jóvenes talentosos (hispanos) creciendo en este país/ … Aportan mucho a la mesa y, sin embargo, no siempre tienen acceso para convertirse en los líderes que pueden ser”, dijo Álvarez. “En Haciendo Caminos, tomamos personas talentosas, con una misión en la fe católica, y les proporcionamos las herramientas para salir y liderar”.

Tome Nota

Vírgenes y Santos

Día de Todos los Santos. Noviembre 1

Día de los Fieles Difuntos. Noviembre 2

Envíenos sus fotos a
editor@jacksondiocese.org

Síganos en Facebook
@ Diócesis Católica de Jackson
Mississippi Católico
Únase a lista de correos electrónicos
Mande un texto: MSCATHOLIC a 84576

Llamado del Sínodo a comunión puede ayudar a un mundo fracturado, dice un teólogo

Por Cindy Wood
CIUDAD DEL VATICANO (CNS) – La Iglesia católica está llamada a ser un instrumento de comunión con Dios y de unidad entre todos los pueblos, pero requiere gracia y “aprender a ‘soportar’ la realidad, con ternura, generosidad, amor y valentía por la paz”. y la salvación del mundo entero”, afirmó un teólogo en la asamblea del Sínodo de los Obispos.

“La comunión es la belleza de la diversidad en la unidad. En un mundo moderno que tiende tanto a la homogeneización como a la fractura, la comunión es un lenguaje de belleza, una armonía de unidad y pluralidad”, dijo Anna Rowlands, profesora de pensamiento y práctica social católica en la Universidad de Durham en Inglaterra.

Cuando los participantes del sínodo comenzaron a trabajar en la segunda sección o módulo del documento de trabajo de la asamblea el 9 de octubre, sus discusiones sobre la promoción de la comunión con Dios y con los demás fueron precedidas por reflexiones ofrecidas por Rowlands y por el padre dominico Timothy Radcliffe, teólogo y ex maestro de la orden dominicana.

Los miembros de la asamblea del Sínodo de los Obispos comienzan a trabajar sobre la comunión como segundo tema del sínodo en el Salón de Audiencias Pablo VI del Vaticano el 9 de octubre de 2023. (Foto CNS/Lola Gómez)

Aunque todavía estaban sentados en mesas redondas según el idioma, muchos de los 364 miembros del sínodo estaban en mesas diferentes a las de la semana anterior. Las nuevas agrupaciones se organizaron según los temas en los que los miembros indicaron que querían trabajar; los temas incluyen la promoción de la unidad a través de obras de caridad y justicia; ecumenismo; ser más acogedor con las personas que se sienten excluidas de la iglesia, como los miembros de la comunidad LGBTQ; y valorar la diversidad cultural, lingüística y racial de la iglesia.
Se esperaba que el Papa Francisco asistiera a la sesión de la mañana, pero surgieron “compromisos imprevistos”, dijo Matteo Bruni, director de la oficina de prensa del Vaticano. Si bien no dijo cuáles eran esos compromisos, Bruni dijo que el Papa Francisco no fue uno de los cuatro miembros del sínodo que estuvieron ausentes ese día porque fueron diagnosticados con COVID.

El cardenal Jean-Claude Hollerich, relator general del sínodo, presentó el módulo diciéndoles a los participantes que una pregunta clave del proceso preparatorio del sínodo -que incluyó sesiones de escucha a nivel parroquial, diocesano, nacional y continental- fue: “¿Cómo podemos ¿Seremos más plenamente signo e instrumento de la unión con Dios y de la unidad de toda la humanidad?”
Dios, que es Padre, Hijo y Espíritu Santo, es “la base de todas las comuniones”, dijo, y “este Dios, que es amor, ama de manera especial a toda la creación, a cada criatura y a cada ser humano”.

“Todos están invitados a ser parte de la iglesia”, dijo el cardenal. “En profunda comunión con su Padre a través del Espíritu Santo, Jesús extendió esta comunión a todos los pecadores. ¿Estamos dispuestos a hacer lo mismo? ¿Estamos dispuestos a hacer esto con grupos que podrían irritarnos porque su forma de ser podría parecer amenazadora? nuestra identidad?”

El Padre Radcliffe recordó a los participantes que el tema de la “formación”, que es más amplio que la capacitación o la educación, surgió repetidamente en las discusiones de la primera semana del sínodo sobre cómo promover una iglesia sinodal, una donde las personas caminan juntas, se escuchan unas a otras y todos toman responsabilidad por la misión.

El Papa Francisco ora, en el Salón de Audiencias Pablo VI del Vaticano, al comienzo de una sesión de trabajo de la asamblea del Sínodo de los Obispos el 6 de octubre de 2023. (Foto CNS/Lola Gómez)

“Una Iglesia sinodal será aquella en la que estemos formados para un amor sin posesión: un amor que no huya del otro ni se apodere de él; un amor que no sea abusivo ni frío”, dijo.
Pero con demasiada frecuencia, dijo el padre Radcliffe, “lo que nos aísla a todos es estar atrapados en pequeños deseos, pequeñas satisfacciones, como vencer a nuestros oponentes o tener estatus, grandes títulos”.

“Muchas personas se sienten excluidas o marginadas en nuestra Iglesia porque les hemos puesto etiquetas abstractas: divorciados vueltos a casar, homosexuales, polígamos, refugiados, africanos, jesuitas”, dijo entre risas el dominico. “Un amigo me dijo el otro día: ‘Odio las etiquetas. Odio que encasillen a la gente. No puedo tolerar a estos conservadores'”.

Rowlands dijo a los miembros y participantes del sínodo que es en la Eucaristía donde se encuentran las diferentes dimensiones de la comunión porque “este es el lugar donde la comunión de los fieles se manifiesta (y) donde recibimos los dones de Dios para el pueblo de Dios”. El orden sacramental nos enseña, alimentándonos, la comunión”.

Diócesis entra en segunda fase del proceso de “Reimaginación Pastoral”

Por Joanna Puddister King
JACKSON – La Diócesis de Jackson comenzó un proceso de renovación pastoral de un año de duración en Pentecostés de 2023 que concluirá en Pentecostés de 2024. Este proceso se inició como resultado del Sínodo diocesano sobre Sinodalidad en 2021.

Durante el proceso del Sínodo se articularon tres prioridades en toda la diócesis que incluyeron todos los datos demográficos (edad, género, raza, etc.). Eran un llamado a la sanación y la unidad; mayor catequesis en todos los niveles; y una comprensión más profunda de las Escrituras.

“Al evaluar cómo desarrollamos estos tres temas en toda la diócesis, discernimos que era necesario un plan pastoral para las parroquias y las misiones”, dice Fran Lavelle, directora de formación en la fe de la diócesis y miembro del equipo central que está trabajando en la reinvención pastoral. proceso.
“La realidad actual en nuestro mundo post-Covid brindó una motivación adicional para mirar dónde estamos como iglesia y cómo estamos llamados a servir a nuestras comunidades”.

El proceso se divide en cinco grandes fases. La primera fase se desarrolló desde Pentecostés este año hasta principios de septiembre, en la que cada pastor o ministro eclesial laico (LEM) estableció un comité de reinvención pastoral y hizo que el comité viera cuatro sesiones de videos de eclesiología y respondiera una serie de preguntas diseñadas para guiar la conversación sobre quiénes somos. como iglesia, dijo Lavelle.

JACKSON – Los participantes del proceso de reinvención pastoral se reunieron en la rectoría de la Catedral de San Pedro Apóstol para ver el último video “Apostólica” de la primera fase. La diócesis está actualmente entrando en la fase dos del proceso de reinvención pastoral que se espera concluya a finales de año. (Foto del padre Nick Adam)

Las cuatro sesiones de video, dirigidas por el obispo Joseph Kopacz, se centran en las cuatro marcas de la iglesia: Una, Santa, Católica y Apostólica; y están disponibles para que cualquiera pueda verlos en el sitio web de la diócesis. (https://jacksondiocese.org/pastoral-reimagining)
El padre Nick Adam, rector de la Catedral de San Pedro Apóstol en Jackson, se sintió muy bien con las reuniones parroquiales para el proceso de reimaginación pastoral con la guía de la serie de videos.
“De las reuniones surgieron un par de temas de alta prioridad”, dijo el padre Nick.

“Necesitamos una presencia mucho mayor en las redes sociales; somos muy buenos acogiendo, pero nuestra evangelización puede ser aún más fuerte; y necesitamos desarrollar un grupo de jóvenes”.
El obispo Kopacz dijo que la primera fase “prepara la mesa para recordarnos lo que significa ser una iglesia y lo que nuestra identidad como católicos requiere de nosotros en el mundo. Nuestro deseo era crear un entendimiento común a partir del cual desarrollar una visión para la Diócesis de Jackson”.

“En otras palabras, fomentar un sentido de unidad subrayado por las cuatro marcas de la iglesia”.
Durante la fase dos, que se extenderá hasta el 31 de diciembre de 2023, cada parroquia llevará a cabo una evaluación parroquial que incluirá la situación actual en la parroquia local, los límites en crecimiento, las áreas que están disminuyendo, las oportunidades de colaboración con otras parroquias en el zona y otras realidades locales.

“En la segunda fase, reimaginaremos las responsabilidades de cada parroquia y misión para fomentar un sentido de unidad, subrayado por las cuatro marcas de la iglesia y basado en datos”, dijo el obispo Kopacz.Esta fase también incluye un informe detallado sobre la demografía diocesana elaborado por el Centro de Investigación Aplicada en el Apostolado (CARA) de la Universidad de Georgetown.

El informe resume la demografía general de la diócesis, así como un perfil de la población católica que vive en los límites de la diócesis. Las fuentes de datos incluyen el Censo Decenal, la Encuesta de Comunidades Estadounidenses (ACS) y otras fuentes de datos de la Oficina del Censo. También se basa en la Encuesta del panorama religioso del Pew Research Center y en el Censo decenal de religión de la Asociación de Estadísticos de Organismos Religiosos Estadounidenses (ASARB).

PEARL – Una iglesia llena de feligreses y banderas de paises Hispanos es una muestra de la demografía de la diócesis. El Padre César Sánchez celebró Misa el primero de octubre a cientos de feligreses antes de comenzar la celebración parrroquial de la Herencia Hispana. (Foto de Carolina Motato Ramirez)

“Después de analizar los datos demográficos, las parroquias buscarán oportunidades de crecimiento; evaluar los ministerios y evaluar los desafíos que se pueden abordar”, dijo Lavelle.

A partir de 2024, la tercera fase del proceso de reinvención consistirá en sesiones guiadas y facilitadas para que los decanatos resuelvan los desafíos, tanto en las áreas crecientes como en las áreas decrecientes del ministerio a nivel local y dentro del decanato.

“El objetivo de la fase tres es obtener una perspectiva realista de la salud y el bienestar del decanato dentro del entorno de cada parroquia individual; y analizar áreas de redundancia y áreas potenciales para compartir recursos”, compartió Lavelle.
La cuarta fase incluirá un período de discernimiento sobre los informes de los seis decanatos de la diócesis y una carta pastoral del obispo Kopacz, que describirá los hallazgos en cada decanato y establecerá parámetros para la implementación de una visión diocesana general.

“Para poder desarrollar una visión integral, cada parroquia y misión tiene la responsabilidad de involucrar a los feligreses para comprender mejor las necesidades y oportunidades en cada lugar”, dice Lavelle.
La fase final concluye el proceso de reimaginación pastoral con una celebración diocesana en Pentecostés de 2024, cuyos detalles aún se están trabajando, dijo Lavelle.

Imagen de la Cruz aporta un enfoque más claro y comprensión del proceso del Sínodo

Por Obispo Joseph R. Kopacz, D.D.
La tercera fase del Sínodo sobre la Sinodalidad comenzó en Roma el 6 de octubre y sesionará durante la mayor parte de este mes. En resumen, recordemos que la Iglesia Católica en todo el mundo llevó a cabo una amplia gama de procesos a partir de finales de 2021 que invitaron a los laicos, consagrados y ordenados a participar activamente en el camino sinodal descrito como de comunión, participación y misión. Esa fue la primera fase a nivel local de cada (Arqui)diócesis.

Bishop Joseph R. Kopacz, D.D.

Durante la segunda etapa, un comité de delegados de cada región continental supervisó el desarrollo de las síntesis diocesanas en los documentos continentales, de los cuales hay siete. Estos representan las voces de los fieles de Estados Unidos/Canadá, América Latina, Europa, Medio Oriente, África, Asia y Oceanía. El buen fruto del Espíritu Santo de las dos primeras etapas de la empresa mundial guía ahora a los delegados en Roma como una hoja de ruta para la discusión, el diálogo y el discernimiento. A partir de las siete síntesis continentales se elabora el documento de trabajo conocido como Instrumentum Laboris. Esto está repleto de teología de la sinodalidad y del proceso que se llevará a cabo en la tercera etapa durante tres semanas, en este mes en Roma.

Es natural preguntar acerca de los participantes en Roma que están dedicando tres semanas de sus vidas a la tercera fase del proceso del Sínodo y que tendrán una voz extraordinaria en este momento de la historia de la iglesia. En un espíritu de transparencia, el Vaticano publicó el 21 de septiembre la lista final de nombres de quienes participarán en la próxima asamblea del Sínodo, incluidos los laicos que serán delegados con derecho a voto en un sínodo de la Iglesia Católica por primera vez. Los delegados están compuestos por representantes seleccionados por las conferencias episcopales y las Iglesias católicas orientales, líderes de la Curia Romana y 120 delegados seleccionados personalmente por el Papa Francisco. (Ver https://bit.ly/SynodParticipantList2023) En total, 363 personas de todo el mundo podrán votar en la XVI Asamblea General Ordinaria del Sínodo de los Obispos, según las estadísticas publicadas por la Oficina de Prensa de la Santa Sede en julio 7. Entre ellos, 54 de los delegados votantes son mujeres. Además de los miembros votantes, otros 75 participantes han sido invitados a la asamblea sinodal para actuar como facilitadores, expertos o asistentes espirituales. (Comunicado del Servicio Católico de Noticias)

El Instrumentum Laboris describe todo lo que el Espíritu Santo ha logrado durante las dos primeras etapas y dice lo siguiente. La primera fase nos permite comprender la importancia de tomar a la iglesia local como punto de referencia privilegiado, como lugar teológico donde los bautizados experimentan en términos prácticos “caminar juntos”. En primer lugar, hemos experimentado la alegría que se expresa en el encuentro sincero y respetuoso entre hermanos y hermanas en la fe: encontrarse es encontrarse con el Señor que está entre nosotros. El escenario continental ha permitido identificar y compartir las situaciones particulares que vive la iglesia en diferentes regiones del mundo. Las dificultades diarias de la pobreza, la violencia, la guerra y los trastornos climáticos quedaron a la vista de muchos de nuestros hermanos y hermanas en todo el mundo, especialmente en Medio Oriente y África.

Como se señaló, el tema o visión del Sínodo es Participación y Misión en la Comunión. Esta comprensión de la iglesia está entrelazada en la dirección que hemos tomado en nuestro proceso pastoral de reimaginación de la iglesia como Una, Santa, Católica y Apostólica. No hay duda de que uno tiene que ser paciente con el proceso de escuchar y discernir dentro de la iglesia mundial de más de mil millones de miembros.

A veces hay más preguntas que respuestas, pero como afirma el Instrumentum Laboris, una iglesia sinodal es abierta, acogedora y abraza a todos, y la característica de una iglesia sinodal es la capacidad de gestionar las tensiones sin ser aplastada. Al mismo tiempo, una iglesia sinodal afronta con honestidad y sin miedo el llamado a una comprensión más profunda de la relación entre amor y verdad, según la invitación de San Pablo. “Más bien, profesando la verdad en el amor, debemos crecer en todo hacia Cristo, que es la cabeza del cuerpo. Y por Cristo el cuerpo entero se ajusta y se liga bien mediante la unión entre sí de todas sus partes; y cuando cada parte funciona bien, todo va creciendo y edificándose en amor.” (Ef 4:15-16) Para incluir auténticamente a todos, es necesario entrar en el misterio de Cristo dejándose formar y transformar por el modo en que vivió la relación entre verdad y amor.

La imagen de la Cruz viene a la mente cuando se busca un enfoque más claro y una comprensión más profunda del proceso del Sínodo. El rayo vertical de la Cruz nos lleva a las bóvedas del cielo donde Dios ha revelado el plan de salvación en la muerte y resurrección del Señor y donde trasciende toda la naturaleza transitoria de la vida. Esto es lo que proclamamos y enseñamos. La viga horizontal de la Cruz representa la vida cotidiana del creyente en cada época, y la inmanencia de Dios en Jesucristo que está con nosotros hasta el fin de los tiempos.

Este es el ámbito del Espíritu Santo que obra para realizar el Reino de Dios en la iglesia y en el mundo. Este es el arduo trabajo del Sínodo que requiere paciencia y confianza a medida que avanzamos sobre casi 2000 años de historia de la iglesia.

Normas Litúrgicas para la Diócesis de Jackson sobre la distribución y recepción de la Sagrada Comunión

Las siguientes normas están vigentes para la Diócesis de Jackson. Se pueden encontrar más normas y directivas en el sitio web diocesano en https://www.jacksondiocese.org/clergy-resources.

La Santa Sede establece normas universales para la celebración reverente de la Sagrada Liturgia. Como parte de este proceso, la Santa Sede pide a cada conferencia de obispos que establezca normas y directivas para su país o región. Además, un obispo local puede establecer directivas para su propia diócesis de acuerdo con las directivas y normas nacionales y universales.

Por lo tanto, el Obispo Joseph R. Kopacz ha establecido las siguientes normas para la distribución y recepción de la Sagrada Comunión en la Diócesis de Jackson de acuerdo con el proceso de la Santa Madre Iglesia para establecer normas y directivas litúrgicas.

• Todas las restricciones de COVID-19 se han levantado desde hace casi un año.

• Los comulgantes pueden recibir la hostia consagrada en la mano o en la lengua. Es decisión del comulgante cómo recibir la Comunión, no del ministro de la Comunión. No rechaces a las personas que quisieran recibirlo en la lengua o en la mano.

• En las Diócesis de los Estados Unidos, que incluye la Diócesis de Jackson, la postura para recibir la Sagrada Comunión es de pie. Esto se aplica a todas las Misas sin importar el idioma o la comunidad. Un ministro de la Comunión no debe rechazar a alguien que se arrodilla para recibir la Sagrada Comunión, pero no se permiten arrodilladoras y/o la implementación de una barandilla de comunión.

• Se aprueba nuevamente la distribución de la Preciosa Sangre del cáliz. Teniendo en cuenta que lo ideal es que ambas especies estén disponibles, un pastor actualmente tiene la opción de dispensar la distribución desde el vaso en momentos de brotes de gripe o Covid que presenten un peligro para la comunidad.

• Se pueden utilizar Ministros Extraordinarios de la Sagrada Comunión para ayudar en la distribución de la Preciosa Sangre y las Hostias Consagradas.

• La purificación de los vasos sagrados debe ser realizada por el sacerdote, diácono o acólito instituido.

En ninguna circunstancia se permite al comulgante autocomulgarse tomando una hostia consagrada del copón o patena. El ministro de la Comunión debe colocar la hostia en la mano o en la lengua del comulgante.

A un comulgante nunca se le permite sumergir la hostia consagrada en el cáliz de la Preciosa Sangre.

• Actualmente, sumergir la hostia por parte del ministro de la Comunión no es una opción en la Diócesis de Jackson.Se pueden encontrar otros recursos sobre la Eucaristía en nuestro sitio web diocesano de Renacimiento

Encuentre otros recursos sobre la Eucaristía en nuestro sitio web de Renacimiento Eucarístico en: https://www.jacksondiocese.org/eucharistic-revival

Saltillo

El Obispo Kopacz, el Obispo Kihneman, Terry Dickson, Juliana Skelton (ambas Diócesis de Biloxi) y yo (Monseñor Michael Flannery), acabamos de regresar de una experiencia llena de fe y alegría en la celebración número 25 del traslado de la sede de la Misión Saltillo, de Parroquia del Perpetuo Socorro a San Miguel. En verdad, habría que estar presente para presenciar la alegría, la fe, la esperanza y el entusiasmo del pueblo de la misión. Para mí personalmente fue una experiencia conmovedora. Se podría compararlo con un retiro espiritual. Además, me brindó la oportunidad de recordar y revivir la experiencia que tuve en Saltillo hace 50 años.

El obispo Kopacz y yo viajamos en United Airlines el lunes 25 de septiembre. Fuimos recibidos por la delegación de Biloxi en el aeropuerto de Houston y de allí viajamos a Monterrey, México donde, el P. David Martínez, pastor de San Miguel, estuvo allí para saludarnos y acompañarnos en el último tramo de nuestro viaje. Tuvimos un poco de tiempo para descansar antes de unirnos a la celebración de la novena en la Misa vespertina en San Miguel a las 7:00 p.m. Durante toda la novena, cada día fue designado para reconocer a algún grupo dentro de la parroquia para recibir atención especial.

A la mañana siguiente (martes), ya estábamos camino a los pueblos de montaña a las 7:00 a.m. Nuestra primera parada fue La Cabaña para bendecir un salón en construcción en el último puesto de avanzada en el camino a Zacatecas y celebrar Misa allí. Se estima que será necesario un año más para completar el proyecto de construcción de la sala. Luego tendrán un lugar para celebrar recepciones de bodas, funerales y quince años. Después de la bendición, los aldeanos nos dieron el desayuno. A las 10:30 a.m. estábamos nuevamente en camino a San José, La Ventura para celebrar una misa fúnebre. La Ventura está a unos 30 kilómetros de la carretera y el camino de entrada es bueno. Después de la misa funeral en La Ventura, iniciamos nuestro viaje de regreso a la carretera y nos detuvimos en el camino en La Presa de San Pedro (El tanque de agua de San Pedro). Allí los obispos bendijeron las nuevas estatuas de San Pedro y San Pablo adquiridas para la capilla. La iglesia es una hermosa iglesia excavada en la roca que se encuentra en la ladera de la montaña. Después de la Misa allí almorzamos con los aldeanos y nos dirigimos a San José, La Brecha, para celebrar otra Misa funeral. Después de la Misa funeral regresamos a Saltillo alrededor de las 5:00 p.m. La última misa del día fue en San Miguel.

A la mañana siguiente (martes), ya estábamos camino a los pueblos de montaña a las 7:00 a.m. Nuestra primera parada fue La Cabaña para bendecir un salón en construcción en el último puesto de avanzada en el camino a Zacatecas y celebrar Misa allí. Se estima que será necesario un año más para completar el proyecto de construcción de la sala. Luego tendrán un lugar para celebrar recepciones de bodas, funerales y quince años. Después de la bendición, los aldeanos nos dieron el desayuno. A las 10:30 a.m. estábamos nuevamente en camino a San José, La Ventura para celebrar una misa fúnebre. La Ventura está a unos 30 kilómetros de la carretera y el camino de entrada es bueno. Después de la misa funeral en La Ventura, iniciamos nuestro viaje de regreso a la carretera y nos detuvimos en el camino en La Presa de San Pedro (El tanque de agua de San Pedro). Allí los obispos bendijeron las nuevas estatuas de San Pedro y San Pablo adquiridas para la capilla. La iglesia es una hermosa iglesia excavada en la roca que se encuentra en la ladera de la montaña. Después de la Misa allí almorzamos con los aldeanos y nos dirigimos a San José, La Brecha, para celebrar otra Misa funeral. Después de la Misa funeral regresamos a Saltillo alrededor de las 5:00 p.m. La última misa del día fue en San Miguel.

Miércoles: nos vio en el camino muy temprano (7:00 a.m.), para dirigirnos a los ranchos. Después de una hora por carretera nos dirigimos por un camino de ripio a desayunar en San José en el municipio de Parras. Allí también celebramos misa. Nuestra siguiente parada fue en la capilla de Nuestra Señora de Guadalupe en Garambullo (que significa fruta que crece en cactus). El pueblo de Garambullo está a 2 horas de la carretera. En cada parada después de la celebración de la Misa, siempre hubo un tiempo reservado para la bendición de estatuas, imágenes y agua bendita. Luego regresamos a Saltillo y nos habían invitado a ir a casa de Yolanda a tomar una merienda que resultó ser una comida completa. Después de esa comida regresamos a San Miguel para la adoración a las 6:00 p.m. seguida de la última Misa del día a las 7:00 p.m. Nos sirvieron otra comida deliciosa y estábamos listos para acostarnos a las 9:30 p.m. La hospitalidad que nos brindaron fue abrumadora.

Jueves: Tuvimos un pequeño descanso ya que el desayuno se sirvió a las 8:00 a.m. Luego partimos para visitar algunas de las capillas atendidas por los curas de San Miguel. Nuestra primera parada fue la iglesia de Cristo Rey. Esta iglesia fue construida por el P. Bill Cullen que estaba destinado en ese momento en San Miguel. Es una hermosa iglesia en la ronda. Nuestra siguiente parada fue la iglesia de St. William, construida por Mons. Michael Thornton (Diócesis de Biloxi) y la iglesia fue dedicada por el Obispo Latino de feliz memoria. Me gustaría compartir un recuerdo especial contigo, lector. El año pasado, cuando fui a visitar San Miguel, fui a celebrar una misa vespertina a la iglesia de St. William. Estábamos a punto de comenzar cuando entró una señora. Después de saludarla, le pregunté si la conocía. Ella respondió que no. Entonces le pregunté si ella siempre fue de esa localidad. Ella dijo que no. Le pregunté dónde nació y ella respondió: La Rosa. ¿Le pregunté en qué año nació? Ella respondió 1972. Entonces le anuncié que fui yo quien la bautizó. El pueblo de La Rosa está a 70 kilómetros de Saltillo. Era uno de los ranchos atendidos por la misión. No sé qué se me ocurrió para decirle, ¿te conozco? Debe haber sido el Espíritu Santo. Yo sí tenía una relación espiritual con ella desde que la bauticé 50 años antes. Dios obra de maneras misteriosas. Ahora estaba reviviendo ese recuerdo.

Continuando nuestro recorrido, fuimos a visitar la iglesia de los Santos Mártires Mexicanos. El martirio de estos hombres tuvo lugar durante la persecución a la iglesia entre 1926-1934. Al inicio de la persecución había 4.500 sacerdotes sirviendo en todo México. Al final, sólo había 334 sacerdotes autorizados por el gobierno para servir a 15.000.000.

Nuestra siguiente parada fue en la capilla de Nuestra Señora de Guadalupe en la colonia La Nueva Imagen. Esta resultó ser la capilla favorita del P. Patrick Quinn (de feliz memoria) para visitar. De allí nos dirigimos a visitar la iglesia de la Divina Misericordia. El obispo Kopacz ayudó al obispo Raúl Vera, obispo emérito de Saltillo, en la dedicación de esta iglesia cuando fue dedicada. Nuestra siguiente parada fue en la iglesia de San Juan Diego. (Nuestra Señora se apareció a San Diego en el Tepeyac 1531). Para nosotros, ningún recorrido por las iglesias y capillas de Saltillo estaría completo sin una visita a la Iglesia del Perpetuo Socorro, que fue la sede original de la misión y el lugar de entierro final del P. Patrick Quinn fundador de la misión. El párroco del Perpetuo Socorro estuvo allí para recibirnos. Allí tuvimos unos momentos de oración. Luego fuimos a la casa de María Elena y Armando para otra deliciosa comida. Regresamos a San Miguel esa noche para la adoración y la celebración de la Misa vespertina. A esto siguió una comida con el personal de la parroquia.

Viernes: era la fiesta grande de San Miguel. Después del desayuno, nos unimos a la procesión de 400 personas que habían venido de los pueblos atendidos por San Miguel. La procesión comenzó aproximadamente a un kilómetro de la iglesia. Estaba encabezada por una camioneta que transportaba una imagen de San Miguel y Nuestra Señora de Guadalupe. Luego vinieron varios grupos de danza de los pueblos. La tradición de la danza se remonta a la época de los indios aztecas y seguía siendo una tradición del pueblo mexicano. Al llegar a San Miguel celebramos Misa. Después de la Misa tuvimos tiempo de compartir una comida y saludar a la gente y disfrutar de la música de la danza interpretada por los diferentes grupos. El Obispo de Saltillo, Mons. Hidalgo Gonzales García se unió a nosotros para la comida. Fue nombrado obispo de Saltillo el 21 de noviembre de 2020. Se reunió con el obispo Kopacz y el obispo Kilhemen el año pasado. Tuvimos una reunión muy informativa con él mientras compartía con nosotros su plan pastoral para la Diócesis de Saltillo y su visión de cómo podríamos participar en ese plan. A las 16:00 horas. Los tres obispos impartieron el Sacramento de la Confirmación a 50 candidatos. Mostró la unidad de la Iglesia Católica trabajando en conjunto. Había llegado el momento de prepararse para la celebración final de la Fiesta de San Miguel. La procesión hacia la iglesia esa noche fue encabezada por los niños pequeños de la parroquia, vestidos como ángeles. Había aproximadamente 120 o más niños vestidos de blanco, como ángeles con alas. A esto le siguió el Mariachi y grupos de danza. La procesión hacia la iglesia de San Miguel duró al menos 10 minutos y fue una experiencia gozosa y llena de fe. La iglesia estaba llena de gente parada afuera. Los bancos del pasillo central a un lado contenían fotografías de los obispos asociados con la parroquia, tanto mexicanos como estadounidenses. Al otro lado del pasillo estaban las fotografías de todos los sacerdotes que habían servido en la parroquia desde sus inicios. Después de la Misa nos trasladamos al patio para la coronación de la reina de la parroquia, amenidad brindada por el mariachi, el canto de la serenata a San Miguel y el reparto de la torta de cumpleaños de San Miguel.

En mi visita a San Miguel, tuve la oportunidad de renovar muchos viejos conocidos de personas que he conocido a lo largo de los años. Una de estas experiencias fue llevar la Unción de los Enfermos y la Sagrada Comunión a una señora mayor que era catequista en la misión hace más de 50 años. Ella fue una inspiración para mí durante mi estancia allí de 1971 a 1974. Durante toda la visita, mi gran pesar fue que Mons. Michael Thornton no estuvo allí para disfrutarlo. Falleció el pasado mes de julio. Puede él descansar en paz. Fue el pastor fundador de San Miguel. Sé que él estaba con nosotros en espíritu. A las 22:00 horas. Llegó el momento de dar nuestro último adiós a la gente y regresar a nuestras habitaciones para empacar para partir temprano hacia el Aeropuerto de Monterrey a la mañana siguiente y regresar a casa.

(Fotos de Monseñor Flannery)

Alrededor Diocesano. Celebraciones Hispanas

PEARL – (arriba) Parroquianas en baile folklorico en San Judas. (Foto de Carolina Motato)

TUPELO – El grupo de baile de Lya Valentine, Emma Thompson, Lupita Triano, Allison Castillo y Alicia Lopez-Herrera. (medio) Raquel Thompson y miembros de St. James en la Celebración de las Culturas promovido por el Departamento de Recreación de la ciudad de Tupelo, el 22 de sep. (debajo) La comunidad celebraron su cultura en la Parroquia de St. James en sep. 30. (Fotos cortesía de Raquel Thompson)

KOSCIUSKO – (der. arriba) Obispo Joseph Kopacz celebra Misa, concelebrada por el Padre Marco Sanchez, ST para celebrar la fiesta patronal de Santa Teresita del Niño Jesús. (Foto cortesia del Padre Marco)

BRANDON – (der. arriba) La Biblioteca Pública de Brandon despliega varios artículos y banderas de varios paises para celebrar el Mes de la Herencia Hispana. (Foto de Elsa Baughman)

Tome Nota

Vírgenes y Santos

Santa Teresa de Jesús. Octubre 15

Día de San Juan Pablo II. Octubre 22

San Antonio Maria Claret. Octubre 24

San Judas Tadeo. Octubre 28

Envíenos sus fotos a
editor@jacksondiocese.org

Síganos en Facebook
@Diócesis Católica de Jackson
Visite Nuestra página web
www.mississippicatholic.com /Español

St Therese. En fiesta patronal, Historia es contada por feligreses.

Una Misa especial fue celebrada por Obispo Joseph Kopacz y concelebrada por el Padre Marco Sanchez, ST para celebrar la fiesta patronal de Santa Teresita del Niño Jesús el domingo 1 de octubre, dando por terminados dos días de recordatorios y memorias compartidas.

Durante estos días fue inaugurada la puesta de una exposición permanente de artículos de prensa y fotos donados por la familia Joseph luego del fallecimiento de Louis Joseph.

Todos los documentos y anotaciones llegaron a las manos de Marilyn Scott, parroquiana desde 1969. Ella, la señora Vicky Bell Pope y otros más, se dieron a la tarea de componer cronológicamente la historia de la iglesia con los documentos recibidos.

La señora Bell Pope, además, en sendas pinturas hizo las reproducciones de “La Cabaña,”   que dio nacimiento a la iglesia, y de la historia del padre Julian M. Guillou, montado a caballo en su viaje desde Yazoo a Kosciusko.

La señora Scott cuenta que ésta fue una celebración” gloriosa y señalo que “…hemos sido muy bendecidos al recibir estos históricos documentos y también por la presencia de sacerdotes trinitarios que se ha hecho cargo de la parroquia”

La familia Joseph fue fundadora de la iglesia desde que el Sr. y la Sra. Joseph comenzaron a escribir una carta al obispo Gerow y a la ciudad de Kosciusko para ayudar a construir una iglesia en necesaria para la creciente comunidad católica.

“En junio de 1940, el obispo Gerow dedicó la iglesia a Santa Teresa del Niño Jesús. El joven y enérgico pastor, la familia Joseph, otros miembros jóvenes y una nueva capilla significaron que había una actividad católica como Kosciusko nunca había visto,” escribió la Sra. Scott, en documento leído durante la Misa.

The departed Louis Joseph wrote “I know in my heart and soul that our parents were guided to Central Mississippi by our good Lord, to not only raise a wonderful family but to help bring the church to our little town.”