La guerra de la Reserva Federal contra la inflación plantea un dilema moral, ya que las subidas de la tasa de interés amenazan a 2 millones de trabajadores

Por Kimberley Heatherington

(OSV News) – Mientras Estados Unidos se recupera de las consecuencias sin precedentes de varios años de la pandemia COVID-19 – complicada por la guerra de Rusia contra Ucrania y los persistentes problemas de la cadena de suministro – los indicadores fiscales apuntan a una futura contracción de la economía del país, e incluso a una eventual recesión. La inflación también sigue siendo persistente, y las tasas de interés de diversos tipos de deuda han subido.

Pero la sugerencia adicional de algunas autoridades de que casi 2 millones de estadounidenses podrían perder sus empleos – impactados por las políticas de lucha contra la inflación de la Reserva Federal de EE.UU. – ha añadido una complicada dinámica financiera y moral a la esperada recuperación del país.

“De hecho, la Junta de la Reserva Federal tiene en cuenta el desempleo”, afirmó Daniel Finn, profesor de economía y teología en el College of St. Benedict de Minnesota, en St. “Es una interpretación económica sostenida por muchos economistas – incluida la Junta de la Reserva Federal – que la inflación que estamos experimentando hoy no está causada principalmente por el aumento de los salarios”.

La Reserva Federal – el banco central de Estados Unidos, conocido como “la Fed” – tiene la misión de promover el funcionamiento eficaz de la economía del país en beneficio de sus ciudadanos.

En esta foto sin fecha, una madre y su hijo revisan la comida en Choice Pantry, operado por Caridades Católicas de Corpus Christi en Texas. El rápido aumento de los precios de los alimentos y la vivienda ha llevado a más personas a recurrir a las despensas para ayudar a estirar su dólar de comestibles. (Foto de CNS/cortesía de Caridades Católicas de Corpus Christi)

Pero la revista Time observó el 9 de febrero que “el banco central no es tu amigo – y un número creciente de economistas se cuestionan si su enfoque histórico para combatir la alta inflación tiene sentido”.

Ese enfoque histórico – aumentar repetidamente las tasas de interés de referencia – está anclado en la convicción política de que un mercado laboral con fuertes contrataciones y salarios crecientes se traduce en una mayor inflación. En resumen, la lógica económica es la siguiente: Los consumidores con más ingresos los gastan, pero las empresas que pagan salarios más elevados también pueden subir sus precios, lo que se traduce en inflación. Pero tasas de interés más altas – y con ellas, mayores pagos de intereses – encarecen los préstamos para las personas y las empresas. Esto suele ralentizar tanto la economía como la inflación, lo que se traduce en una menor actividad empresarial, menos contrataciones y salarios más bajos.

“Las proyecciones no son más que proyecciones, y a menudo son más erróneas que acertadas”, afirma Samuel Gregg, miembro distinguido en economía política del Instituto Americano de Investigación Económica y académico afiliado al Acton Institute.

“Lo que sí sé es que hay que reducir la inflación que aumenta los precios para todos, y que afecta desproporcionadamente a los pobres de forma negativa”, dijo Gregg a OSV News. “De lo contrario, el poder adquisitivo de nuestro dinero se seguirá erosionando, y el valor de los sueldos, las rentas y los aumentos salariales se diluirá”.

La solución no está exenta de consecuencias. “Sacar la inflación del torrente monetario significa que la Reserva Federal tiene que subir las tasas de interés. El efecto secundario de eso es una ralentización económica, quizá incluso una recesión, y posibles pérdidas de empleo”, dijo Gregg. “Si hubiera una manera de reducir la inflación sin dolor, te lo diría. Pero la realidad es que no existe tal manera. Esa, sin embargo, es una razón más por la cual el genio de la inflación nunca debe salir de la botella en primer lugar”.

Sin embargo, Finn duda de la sugerencia de que la Fed tenga la intención de dejar a la gente sin trabajo para controlar la inflación, señalando que el presidente de la Reserva Federal, Jerome Powell, “ha dicho públicamente que realmente no cree que los salarios sean la causa principal de nuestra inflación actual y, por lo tanto, no le preocupa que los salarios empujen la inflación”.

“Él no tiene la opinión de que necesitamos aumentar el desempleo para reducir la presión sobre los salarios con el fin de reducir la inflación”, dijo Finn.

Un breve intercambio entre la senadora demócrata Elizabeth Warren y Powell durante una audiencia celebrada el 7 de marzo en la Comisión de Banca, Vivienda y Asuntos Urbanos del Senado captó el desacuerdo interpretativo.

Parafraseando la valoración de Powell de que la inflación hace sufrir a todo el mundo – no sólo a los estadounidenses que podrían perder sus empleos si la Reserva Federal prolonga lo que algunos juzgan un curso estratégico perjudicial – Warren preguntó retóricamente: “¿Y dejar a 2 millones sin trabajo es sólo parte del costo, y simplemente tienen que soportarlo?”.

Powell respondió a la pregunta de Warren con la suya propia: “Bueno, ¿estará mejor la gente trabajadora si… la inflación se mantiene en el 5%, 6%?”.

La tasa de inflación objetivo de la Fed es del 2%, pero muchos economistas afirman que el desempleo tendría que alcanzar el 7.5% para lograrlo. La tasa de desempleo actual es del 3.5%.

“La Iglesia nunca ha intervenido para decir que un sistema económico es mejor que otro”, explicó Finn. “Siempre ha sido ‘aquí están los requisitos que debe cumplir cualquier sistema económico’. Y esta cuestión del desempleo es, de hecho, una de las mayores críticas a las economías de mercado, porque deja las decisiones sobre el empleo en gran medida en manos de las empresas privadas”.

En lugar de dar preferencia a sistemas económicos específicos, “el pensamiento social católico ha dicho: ‘Estos son los criterios por los que toda persona responsable y todo gobierno responsable deberían preocuparse'”, observó Finn.

Dicho esto, Finn señaló que históricamente ha habido “una convicción concreta – basada en las Escrituras; basada en las palabras de Jesús para nosotros – de que cualquier cristiano responsable tiene que preocuparse por la vida económica y por cómo trata a otros de nuestros hermanos y hermanas”.

Anthony Annett, profesor visitante en la Universidad de Columbia, antiguo economista jefe del Fondo Monetario Internacional y autor de “Cathonomics: How Catholic Tradition Can Create a More Just Economy”, advirtió que los que más probabilidades tendrán de perder su empleo a medida que se retoque la economía serán “los trabajadores con salarios bajos, los trabajadores vulnerables, los trabajadores precarios, (y) los trabajadores de las minorías”.

“Estas son las personas que van a ser golpeadas primero”, dijo a OSV News.

En opinión de Annett, el intento de la Reserva Federal de controlar la inflación podría tener consecuencias tanto morales como financieras.

“Creo que se trata de una cuestión moral. Porque sí, la inflación es mala. Es mala para los pobres; es mala para las personas con ingresos fijos. Pero el desempleo es peor”, dijo. “Si no tienes ingresos, estás en una situación mucho peor que si los precios son algo más altos. Por eso creo que la Fed tiene que parar ahora mismo, porque se está volviendo demasiado preocupante”.

Annett coincide con Finn en que la inflación actual no es necesariamente atribuible al aumento de los salarios; más bien, la extraña dinámica de la pandemia COVID-19 – interrupciones de la cadena de suministro, diferentes pautas de consumo – y la reapertura escalonada de la economía mundial son las causas fundamentales.

“Se ha producido un desplazamiento masivo de la demanda, desde los servicios hacia los bienes. Y eso hizo subir la inflación”, dijo Annett. “Y si ésa es la razón principal, volver a atacarla con subidas de las tasas de interés no es la forma de hacerlo. Porque se ajustará por sí sola”.

Annett subrayó: “La Reserva Federal tiene un doble mandato: reducir la inflación, pero también el empleo. Tiene que equilibrarlo adecuadamente. Y dejar sin trabajo a un millón y medio o dos millones de personas no creo que sea equilibrarlo adecuadamente”.

Lo ideal, dijo Annett, sería que un mercado libre y unos agentes financieros virtuosos garantizaran tanto el interés público como una economía estable. Pero como han demostrado las recientes crisis bancarias, “eso no basta. Eso no te garantiza el respeto por el bien común y por el desarrollo integral de cada persona”.

Navegar por un camino que respete esas dos preocupaciones es competencia de la doctrina social católica.

“No nos gusta el colectivismo socialista. Pero tampoco nos gusta el individualismo libertario”, dijo Annett. “El Papa Pío XI lo llamó las dos rocas del naufragio. Hay que evitar las dos cosas”.

(Kimberley Heatherington escribe para OSV News desde Virginia.)

El gobierno de Biden anuncia un nuevo plan para reducir la llegada de inmigrantes cuando finalice el Título 42

Por Kate Scanlon, OSV News

WASHINGTON (OSV News) — La administración Biden anunció el 27 de abril nuevas medidas que tomaría en un esfuerzo por reducir las llegadas de migrantes a la frontera entre EE.UU. y México cuando el Título 42 expire en mayo.

En declaraciones en el Departamento de Estado, el secretario de Estado, Antony Blinken, y el secretario de Seguridad Nacional, Alejandro Mayorkas, dijeron que la administración crearía centros de procesamiento de migrantes en Centroamérica y Sudamérica para examinar a las personas que buscan entrar y determinar si tienen una vía legal.

La administración también ampliará las vías legales de entrada, al tiempo que aumentará las deportaciones de quienes entren ilegalmente a Estados Unidos.

Blinken dijo que los centros “mejorarán el acceso de las personas calificadas” al reasentamiento de refugiados, la reunificación familiar y el asentamiento legal en Estados Unidos o en otros países.
“Estos centros darán un paso muy importante para evitar que la gente haga el peligroso viaje a la frontera, proporcionando una opción mucho más segura y legal para emigrar que pueden seguir en y desde sus propios países”, dijo Blinken.

El secretario de Estado de EE. UU., Anthony Blinken, y el secretario de Seguridad Nacional de EE. UU., Alejandro Mayorkas, en una foto de archivo del 1 de marzo de 2021 con el presidente Joe Biden. Blinken y Mayorkas emitieron una declaración el 27 de abril de 2023 sobre los pasos que tomará la administración de Biden en un esfuerzo por reducir las llegadas de inmigrantes a la frontera entre Estados Unidos y México cuando el Título 42 expire el 11 de mayo. (OSV News photo/Kevin Lamarque, Reuters)

Mayorkas dijo que “cuando las personas tienen vías seguras y ordenadas para venir a Estados Unidos, y se enfrentan a consecuencias por no hacerlo, utilizan esas vías”.

El Título 42 es una parte de la ley federal de salud pública de Estados Unidos que otorga al gobierno federal cierta autoridad para implementar medidas de emergencia para prevenir la propagación de enfermedades contagiosas prohibiendo la entrada a algunas personas.

El entonces presidente Donald Trump implementó la política en 2020 al inicio de la pandemia de COVID-19, pero la medida se consideró parte de los intentos más amplios de su administración para reducir la migración. El uso del Título 42 para expulsar a los migrantes en la frontera sur fue criticado por algunos expertos de salud pública, que argumentaron que su uso estaba políticamente motivado en lugar de basado en la evidencia.

Desde entonces, el Título 42 se ha invocado más de 2.7 millones de veces para expulsar a migrantes, incluidos los solicitantes de asilo, según datos de la Oficina de Aduanas y Protección de Fronteras de Estados Unidos. El Título 42 finalizará el 11 de mayo.

J. Kevin Appleby, director ejecutivo interino del Centro de Estudios sobre Migración, dijo a OSV News que el anuncio de la administración Biden parece ser “un paso positivo hacia adelante”.

“Por supuesto, como siempre, si tendrá éxito o no dependerá de cómo se implemente algo y qué recursos se dediquen a la implementación”, dijo Appleby. “Pero da a los solicitantes de asilo la oportunidad de contar sus historias y de que se resuelvan sus casos sin emprender un peligroso viaje hacia el norte”.

Appleby, ex asesor de política migratoria de los obispos estadounidenses, dijo que, durante el último cuarto de siglo, “el Congreso no ha tenido la valentía política de reformar el sistema de inmigración”.
“Así que estas respuestas se dejan en manos del poder ejecutivo, cuando el Congreso debería estar trabajando con la administración para aprobar leyes que revisen nuestras leyes de inmigración”, dijo.
Los republicanos han hecho de la inmigración una parte clave de sus críticas a la administración Biden, acusándola de políticas laxas. En una declaración reaccionando a la candidatura de Biden a la reelección en 2024, el expresidente Donald Trump, en medio de su tercera candidatura a la Casa Blanca después de que Biden le derrotara en 2020, dijo: “Bajo Biden, la Frontera Sur ha sido abolida — y millones de extranjeros ilegales han sido soltados en nuestras comunidades”.

Una hoja informativa del Departamento de Estado sobre las nuevas acciones dijo: “El levantamiento de la orden del Título 42 no significa que la frontera esté abierta”.

La hoja informativa dijo que cualquier individuo que cruce ilegalmente la frontera sur de EE.UU. después de que se levante el Título 42 será procesado para su expulsión acelerada, se le prohibirá la reentrada durante al menos cinco años si se ordena su expulsión y no sería elegible para el asilo “a falta de una excepción aplicable”.

“Para evitar estas consecuencias, se anima a las personas a utilizar las numerosas vías legales que Estados Unidos ha ampliado en los últimos dos años”, dice la hoja informativa.

Los obispos estadounidenses y otros defensores católicos de la inmigración han criticado el Título 42, así como el uso continuo de la política de la era Trump por parte de la administración Biden.

OSV News se ha comunicado con la Conferencia de Obispos Católicos de Estados Unidos para obtener comentarios.

(Kate Scanlon es una reportera nacional de OSV News que cubre Washington. Síguela en Twitter @kgscanlon.)

El Papa Francisco decide que las mujeres sean miembros con derecho a voto en el Sínodo de los Obispos

Por Cindy Wooden

CIUDAD DEL VATICANO (CNS) – Al menos tres docenas de mujeres serán miembros con derecho a voto de la asamblea del Sínodo de los Obispos en octubre, según ha decidido el Papa Francisco.

En una decisión formalizada el 17 de abril, “el Santo Padre aprobó la extensión de la participación en la asamblea sinodal a los ‘no obispos’: sacerdotes, diáconos, hombres y mujeres consagrados, hombres y mujeres laicos”, dijo la oficina sinodal en un comunicado el 26 de abril.

El cardenal Jean-Claude Hollerich, relator general del sínodo, dijo a los periodistas el 26 de abril que alrededor del 21% de los 370 miembros del sínodo no serían obispos y que al menos la mitad de ese grupo serían mujeres.

Según el cardenal, la incorporación de mujeres y jóvenes garantizará que “la Iglesia esté bien representada” en la oración y los debates previstos del 4 al 29 de octubre en el Vaticano. “Será una alegría tener a toda la Iglesia representada en Roma para el sínodo”.

Mujeres líderes, que formaban parte de una delegación a Roma con Catholic Extension, se encuentran al comienzo de una conferencia de prensa en el Vaticano el 27 de abril de 2023. En la foto, de izquierda a derecha: Melva Arbelo; Hermana Carol Keehan, Hija de la Caridad; la Hermana Teresiana Clarice Suchy; Sor Norma Pimentel, miembro de las Misioneras de Jesús; Sor Fátima Santiago, miembro de las Hermanas Misioneras del Inmaculado Corazón de María; la hermana Marie-Paule Willem, franciscana misionera de María; y Jean Fedigan. (Foto del SNC/Carol Glatz)

“Como pueden ver, el espacio en la tienda se está ampliando”, dijo a los periodistas el cardenal Mario Grech, secretario general del sínodo, haciéndose eco del título que se había elegido para el documento de trabajo de la recién terminada fase continental del sínodo. En el documento se afirma que en las sesiones de escucha locales y nacionales del Sínodo se plantearon preguntas constantes sobre cómo promover una mayor inclusión en la Iglesia católica manteniéndose fieles a la doctrina de la Iglesia.

“El Sínodo de los Obispos seguirá siendo un sínodo de obispos”, dijo el cardenal Grech, pero se “enriquecerá” con representantes de toda la Iglesia.

La decisión del Papa de ampliar las categorías de los miembros del sínodo, decía la declaración de abril, “está en continuidad” con la creciente comprensión de la Iglesia católica de la dimensión sinodal de la Iglesia y “la consiguiente comprensión de las instituciones a través de las cuales se ejerce”.

Desde que se reinstituyó el Sínodo de los Obispos tras el Concilio Vaticano II, todos sus miembros con derecho a voto han sido hombres. Los miembros eran principalmente cardenales y obispos, excepto los 10 sacerdotes – y recientemente un hermano religioso – elegidos por la Unión de Superiores Generales.

Ahora, en lugar de que la Unión de Superiores Generales elija a 10 miembros con derecho a voto, la oficina dijo que elegirá sólo a cinco sacerdotes o hermanos. Y la Unión Internacional de Superioras Generales elegirá también a cinco hermanas o monjas.

Los sínodos anteriores han incluido a mujeres como “auditoras” sin derecho a voto, un grupo que incluía a muchas mujeres.

El Papa Francisco ha eliminado la categoría de “auditor” de los participantes en el sínodo, según el Vaticano. En su lugar, habrá un grupo de 70 miembros no prelados que representan a “diversas agrupaciones de fieles del Pueblo de Dios”, incluyendo sacerdotes, mujeres consagradas, diáconos y laicos de todas partes del mundo.

El Papa elegirá a los 70 de una lista de 140 personas seleccionadas por obispos y organizadores de seis agrupaciones regionales de obispos y por la Asamblea de Patriarcas de las Iglesias Católicas Orientales. Las seis agrupaciones regionales son: el Consejo Episcopal Latinoamericano y Caribeño, conocido como CELAM; el Consejo de Conferencias Episcopales de Europa; el Simposio de Conferencias Episcopales de África y Madagascar; la Federación de Conferencias Episcopales de Asia: la Federación de Conferencias Episcopales Católicas de Oceanía; y la Conferencia de Obispos Católicos de Estados Unidos y la Conferencia Episcopal Católica de Canadá juntas.

Cada uno de los siete grupos episcopales designará a 20 personas, dice el comunicado, y “se pide que el 50% de ellas sean mujeres y que se destaque también la presencia de jóvenes”.

Además de los 10 religiosos elegidos por sus grupos de superiores y los 70 miembros no obispos nominados por los grupos continentales, el Papa Francisco podrá incluir a “miembros no obispos” entre los miembros que él indique.

Y, ya que la dirección de la secretaría del sínodo serán miembros de pleno derecho, eso incluye a la hermana Nathalie Becquart, misionera de Xavière, subsecretaria del sínodo. El cardenal Hollerich añadió que, después de todo el trabajo que han realizado para preparar el sínodo, “sería muy injusto” excluirlos como miembros.

La mayoría de los miembros del sínodo serán obispos elegidos por su conferencia episcopal o por su sínodo de obispos católicos orientales. El número de delegados que puede elegir cada conferencia depende de su tamaño. Las conferencias episcopales con más de 200 miembros — como las de Italia, Brasil y Estados Unidos – elegirán a cinco miembros.

Planta una semilla

Por hermana alies therese

El día de la tierra planté una semilla, un girasol gigante que me envió un amigo en California. Si brota y se nutre, puede crecer hasta 15’14 “de ancho. ¡Oh, Dios! Eso es mucho para una semilla.

 Mientras pensaba en esta semilla, y ella me envió 7, recordé las maravillas que Dios ha hecho y me atrajo el Salmo 104, donde encontramos a Dios como proveedor y creador.

Hermana alies therese

En esta primavera, algunos de nuestros lectores tal vez estén sufriendo enfermedades o accidentes, envejecimiento o soledad. Puede que estés leyendo desde una prisión o un asilo de ancianos, desde tu guarida o tu jardín. Lo que aprendí de este Salmo es cuán rico y generoso es nuestro Dios y no importa dónde haga esta meditación, (34) puedo cantar (33) alabanzas a Dios. Esta es una semilla de esperanza.

¿Cuál es la semilla que plantarás hoy? ¿Es una semilla real como la mía, o será una semilla de felicidad o curación? ¿Será una semilla de acción de gracias, paz, gratitud o amistad?

Ve cada día como la oportunidad de plantar una semilla. Tal vez sea una llamada telefónica, amabilidad con un visitante o escribir un correo electrónico a alguien que está enfermo. Una semilla puede cambiar mucho las cosas. Este Dios lo sabe y nos muestra la bondad de Dios hacia nosotros. Nuestra ‘simiente única’ favorita es Jesús. Una semilla fue plantada y cultivada y rescatada de un peligro permanente al ser resucitada de entre los muertos. No todas las semillas parecen florecer como Jesús… brotan y luego se marchitan. No quiero marchitarme y el Salmo 104 me muestra cómo Dios, nuestro proveedor, desea lo mismo.

Recordamos la historia de las semillas en el camino, las semillas en los espinos, las semillas en tierra fértil. Quizás solo una semilla prosperó… la rica tierra lo hizo posible. Los pájaros y los reptiles provienen cada uno de una semilla. De todas las posibilidades reproductivas, una semilla está disponible, una semilla florece y una semilla proporciona alimento. ¿Y qué dijo Jesús que era la semilla? La palabra de Dios. ¿Estás leyendo tu Biblia? ¿Estás encontrando nuevas formas de crecer en Dios? ¿Estás orando en acción de gracias por los tesoros de Dios?

En este Salmo, estoy feliz de leer sobre toda la creación y también sobre cómo puedo responder. Puedo regocijarme, cantar y meditar y mi amor por Dios se profundiza, y aumento mi asombro y admiración por todo lo que Dios creó. También puedo estar alerta a las formas en que los seres humanos no son generosos con la creación de Dios.

Russell Baker, un periodista estadounidense comentó en un artículo del New York Times el 22 de febrero de 1968: “Vivimos en un entorno cuyo principal producto es la basura”. Me atrevo a decir que no nos hemos vuelto más responsables en todos estos años. Rachel Carson, ambientalista y escritora, en su obra Silent Spring- Primavera Silente, señaló: “Por primera vez en la historia del mundo, cada ser humano ahora está sujeto al contacto con químicos peligrosos, desde el momento de la concepción hasta la muerte”.

¿Qué es esta basura al lado del plástico obvio? Bueno, cuando es una semilla de resentimiento o ira, odio o arrepentimiento, la ‘basura’ en nuestras almas crece. Cuando nuestro enfoque está en las cosas de este mundo que nos alejan de Dios, los químicos nos rodean… peligrosos y contaminantes.

¿Qué rompe el ciclo de la negatividad? ¿Qué hace que seamos transformados en pacificadores e hijos de un Padre tan misericordioso?

Bueno, plante las semillas, incluso si solo una de caridad dentro y todas las demás encajarán. Considere Santiago 1:21ss, quien coloca las semillas de la acogida y la mansedumbre contra las de la sordidez y la maldad. Son como la niebla de humo tóxico en la garganta que impide cantar.

¡Once-ler! (Narrador, por su interpretación en español)”, exclamó con un graznido cruento.

‘¡Once-ler! ¡Estás haciendo un humo tan humoso! Mis pobres Swomee-Swams ( Cisnes naranjas, en español)… ¡por qué no pueden cantar una nota! Nadie puede cantar si tiene humo en la garganta”. (Dr. Seuss, Libro: El Lorax).

Earth Day Bishop Kopacz message 2023
https://www.youtube.com/watch?v=m2KlXT2QMNs

Eso incluye el humo en nuestros corazones. Plante algo hoy que traiga alegría y sanación a los corazones y las mentes. Podrían ser cosas verdes que expulsen la niebla tóxica y nos inviten al refrigerio de Dios.

BENDICIONES.

(La hermana alies therese es una ermitaña con votos canónicos cuyos días se forman en torno a la oración y la escritura.)

Priests of the diocese

From the Archives
By Mary Woodward

JACKSON – Join me in praying for the priests of our diocese, who participated in their annual retreat the week of April 17-21. Enjoy these photos from the archives of past retreats and priests who have served the Diocese of Jackson. May the blessings of this Easter season bring you joy and peace!

(Mary Woodward is Chancellor and Archivist for the Diocese of Jackson.)

Two potential Black Catholic saints inspire audiences through theatrical productions

By Kimberley Heatherington

(OSV News) – Their births were separated by almost a century, but Venerable Father Augustus Tolton (1854-1897) and Servant of God Sister Thea Bowman (1937-1990) both endured and triumphed against the sin of racism in their own eras and in the Catholic Church, offering future generations of every race a timeless legacy of what it means to live in the freedom of following Jesus Christ.

As they progress toward sainthood, and the possibility of becoming the first recognized Black Catholic saints of the United States, Father Tolton’s and Sister Thea’s lives are inspiring theater audiences from coast to coast in two plays, St. Luke Productions’ “Tolton: From Slave to Priest” and ValLimar Jansen’s “I Will Live Until I Die.”

“I was in Springfield Diocese in Illinois,” shared touring actor Leonardo Defilippis, “and this country priest – a pastor – gave me a book on (Tolton), a prayer card and a picture of him.”

Defilippis is founder and president of St. Luke Productions, a theatrical company that brought Father Tolton’s story to the stage, as well as those of many other saints. The priest asked, “Leonardo, why don’t you do a show on him?”

This is a poster from Viterbo University in La Crosse, Wis., about a musical that capped the school’s annual Sister Thea Bowman Celebration Week March 27-30, 2023. ValLimar Jansen, a singer, composer, recording artist, professor, worship leader and workshop presenter, performed the musical on the life of the late Sister Bowman. Viterbo was founded in 1890 by the Franciscan Sisters of Perpetual Adoration, the order to which Sister Bowman belonged. (OSV News photo/courtesy of Franciscan Sisters of Perpetual Adoration)

Born to enslaved parents in Missouri, Augustus Tolton, two siblings and his mother, Martha Tolton, fled to Illinois for freedom in 1862 after his father, Peter Tolton, escaped to join the Union Army during the Civil War.

An Irish priest, Father Peter McGirr, encouraged young “Gus,” as he was known, to consider the priesthood. No U.S. Catholic seminary would then admit African Americans, so in the face of this racist opposition, Augustus Tolton eventually studied for priesthood in Rome. He was ordained in 1886 – the first publicly known African American Catholic priest – and instead of becoming a missionary to Africa, as he expected, Father Tolton returned to the U.S., serving in two Illinois cities, Quincy and Chicago, before dying of heat stroke in 1897.

“Tolton: From Slave to Priest,” which uses multimedia projections and music, has been seen by 65,000 Catholics in parishes, seminaries and schools. Audiences newly aware of Father Tolton have responded by asking his intercession and praying to him, which may assist his sainthood cause.
“His story is one of unity,” Defilippis said, “one of peace and forgiveness, and the complete trust in God – that God will take care of us.”

In the role of Father Tolton is veteran television and stage actor Jim Coleman. “It is my mission to share his story,” Coleman told OSV News. “It is something that has become my passion.”

The production also is impacting vocations. Coleman shared that seminarians have told him, “’This is the push I needed. I was close to giving up – and then to see what he had to go through makes me realize I have nothing to compare to that. My journey is easy.’”

Father Jim Lowe, a Companions of the Cross priest who serves at St. Scholastica Catholic Church in Detroit, recalled the play’s scene of Father Tolton’s first Mass when the play came to his parish March 25. “It was very moving. It felt like I was actually present at his first Mass,” he told OSV News.

Father Lowe detected a presence in that moment – and has no doubt who it was. “In a sense, being at this play brought Father Tolton to life both theatrically and spiritually,” he said. “There is no doubt in my mind that he was interceding on our behalf as we witnessed his heroic life journey.”

After repeatedly being told she reminded people of Sister Thea Bowman, ValLimar Jansen – a singer, composer, recording artist, professor, worship leader and workshop presenter – decided “someone” was sending her a message.

Using as source material the biography penned by a nun who knew Sister Thea, Jansen wrote and arranged a musical, “I Will Live Until I Die,” which takes its title from Sister Thea’s reaction to her cancer diagnosis later in life.

“Her main message was everyone should be valued – everybody’s culture,” Jansen told OSV News. “And to learn what that is; to celebrate it; to bring all that we are to the Eucharistic table.”

Born to African American Methodist parents, Sister Thea was raised in the “Jim Crow” South, with its racial segregation and persistent threat of anti-Black violence. While her grandfather was born under slavery, her father, a physician, actually moved his family from New York to Mississippi to provide medical care to Black families who were denied this basic human right.

After attending a Canton, Mississippi, school staffed by the Franciscan Sisters of Perpetual Adoration (FSPA), Sister Thea became a Catholic at age 9. As a teenager, she joined the FSPA and later taught, evangelized, earned a doctorate and directed intercultural affairs for the Diocese of Jackson, Mississippi. Breast cancer cut her life short – but not before Sister Thea established a prophetic witness to the Black American Catholic experience. Despite various injustices and limitations she encountered, Sister Thea nonetheless steadfastly maintained, “God makes a way out of no way.”
“ValLimar truly embodied Sister Thea,” said FSPA Sister Laura Nettles, professor and executive director of Mission and Social Justice at Viterbo University in La Crosse, Wisconsin, where Jansen’s musical capped the school’s annual Sister Thea Bowman Celebration Week in March.

“It was a resounding success, a full house with multiple standing ovations,” Sister Nettles told OSV News. “People walked away happy, and singing the spirituals that were so important to Thea.”
Sister Nettles reflected, “This work is especially poignant for my congregation and university given that Sister Thea experienced racism in both. We need Sister Thea’s message and guidance now more than ever.”

The positive reaction of Sister Thea’s own religious community has been important to Jansen – energizing her as she tours the musical nationwide, opening eyes and ears to Sister Thea’s essential teaching. “It wasn’t about a color issue,” explained Jansen. “It was about how we are a family of families.”

Parishes reach out to communities in need after tornadoes

By Joanna Puddister King

JACKSON – Parishes around the diocese have been lending a hand to communities devastated after recent tornadoes. Whether by second collections, monetary donations to charitable causes, donating items or by traveling to affected communities to serve, the Catholic community has been there to help.
Catholic Charities has also been on a mission to be a visible sign of Christ’s love in affected communities. In addition to being present to serve, just hours after a tornado ripped through Rolling Fork, Charities has been assisting with community needs including non-perishable food, toiletries, blankets, pillows, flash lights, batteries, water and more.

“I encourage all to continue to pray and find ways to support all affected communities,” said Bishop Joseph Kopacz.

To support the work of Catholic Charities disaster relief, learn more or donate online at https://jacksondiocese.org/storm-donations.

Members from the young adult group at Sacred Heart Camden led a caravan with a commercial cooker to prepare and serve grilled chicken and beverages to approximately 200 people in the Rolling Fork community. (Photos courtesy of Father Guy Wilson)

Dcn. Dien Hoang and his wife Hong, of the Cathedral of St. Peter in Jackson, purchased and delivered supplies to Rolling Fork on April 5. (Photos by Hong Hoang)

Youth

Youth around the diocese

SOUTHAVEN

SOUTHAVEN – Sacred Heart School’s eighth grade students presented live Stations of the Cross just before the Easter holidays. (Photos Father Vien Nguyen, SCJ)
Over 100 youth from Holy Spirit Hernando, Christ the King Southaven and Queen of Peace Olive Branch gathered for a Seder Meal on Wednesday, March 26. (Photo by Amanda Mahla Ready)

TUPELO

TUPELO – Matthew Becker assists as an altar server at Mass on Easter Sunday at St. James parish. (Photo courtesy of Michelle Harkins)

JACKSON

JACKSON – Presenting Mr. and Miss Sister Thea Bowman School 2023: King Zamare’ Owen and Queen Raleigh Mozee. (Photos by Christopher Payne)

MERIDIAN

MERIDIAN – Myles Spears sells “shamrock supplies” to Liza Thompson at the St. Patrick School Store. (Photos by Emily Thompson)
Students enjoy snocones as a reward for academic achievement in the third nine weeks

VICKSBURG

Vicksburg Catholic School Class of 2023, along with the help of Golding Barge Line, kicked off their senior retreat week with the installation of a “blessing box” on the corner of Grove Street and Howard Street. The idea is that you “take what you need and give what you can.” (Photos by Lindsey Bradley)

JACKSON

JACKSON – St. Richard School hosted its Spring Family Fun Night recently. While parents attended the Parent Association general membership meeting, students got to do exciting STEM experiments and art projects. Everyone was treated to a delicious dinner courtesy of the PA. Pictured l-r: Bo Brown and Gavin Sutton have fun being “scientists.” (Photo by Tammy Conrad)

Focus on compassionate love of God

By Bishop Joseph R. Kopacz, D.D.

The final day of the Easter Octave is Divine Mercy Sunday. This year we celebrated the day of the resurrection of the merciful Lord from the dead for the 24th time since the Jubilee Year of 2000 with the canonization of St. Faustina when St. John Paul II called the universal church to a feast of divine mercy on the second Sunday of Easter.

Divine Mercy Sunday focuses on the compassionate love of God given through Christ’s death, burial and resurrection. As Pope John Paul II stated, “Divine Mercy reaches human beings through the heart of the Christ crucified.”

The iconic symbol of divine mercy is marked by the two rays of light, red and blue, shining from the heart of the risen Lord who revealed to Sister Faustina that they represent blood and water illuminating the world.

Bishop Joseph R. Kopacz, D.D.

We immediately think of the testimony given by the Evangelist John, who, when a soldier on Calvary pierced Christ’s side with his spear, sees blood and water flowing from it. (John 19:34) Moreover, if the blood recalls the sacrifice of the Cross and the gift of the Eucharist, the water, in Johannine symbolism, represents both Baptism and also the gift of the Holy Spirit. (John 3:5; 4:14; 7:37-39)

The Lord Jesus in the miracle of the resurrection transformed death into life, despair into hope, and fear and shame into peace and promise. Each of the four Gospels testify to the power of the resurrection and on Divine Mercy Sunday the Gospel of John takes center stage with his Pentecost moment.

The apostles were huddled together in fear after the crucifixion with their world shattered like broken glass. Traumatized and deeply wounded by the crucifixion the risen Lord came into their midst and bathed the 11 with God’s mercy, peace and the gift of the Holy Spirit. He showed them his hands and his side, even inviting Thomas to touch the wounds inflicted by the crucifixion. His wounds healed their shattered spirit. His cleansing gift of peace with the outpouring of the Holy Spirit empowered them to live in a way they had never known.

Before breathing the gift of the Holy Spirit into his born-again friends the crucified and risen One gave them their mission. “As the Father has sent me, so I send you,” and in these words and in this action, we see the plan of God’s salvation let loose in the world.

The church’s mandate is the same yesterday, today, and until the Lord comes again, i.e. to announce the Good News of Jesus Christ and to make disciples of all the nations. In the light of Divine Mercy, St. Paul provides some wonderful imagery regarding the vision for our mission. All of us are called to be servants of Jesus Christ and stewards of God’s mysteries, ambassadors of Jesus Christ and ministers of reconciliation.

The gift of divine mercy we have received; we ought to give as a gift. During the synod process in our diocese those who participated voiced a strong concern for a greater unity that addresses the wounds and polarization in our church and in society. Divine mercy is that leaven in the bread that can transform this brokenness.

For example, within the body of the church the victims of sexual abuse must be provided every opportunity for healing, peace and new life. The perpetrators and those who failed to protect need the mercy and forgiveness of God in large doses. Wherever the wounds exist in his Body, the church, the Lord stands ready to heal. In Christ we want to be new creations. As we look inward to restore the life in abundance that Jesus promised, we also live and move, and have our being in the world to announce the Gospel bringing this Good News of the Kingdom of God to our world.

In the spirit of Divine Mercy, the prayer attributed to St. Francis of Assisi comes to mind as a beacon for the work entrusted to us.

“Lord, make me an instrument of your peace. Where there is hatred, let me sow love. Where there is injury, pardon. Where there is doubt, faith. Where there is despair, hope. Where there is darkness, light. And where there is sadness, joy. O divine master, grant that I may not so much seek to be consoled as to console, to be understood as to understand, to be loved as to love. For it is in giving that we receive; it is in pardoning that we are pardoned. And it is in dying that we are born to eternal life. Amen.”

Men’s Holy Week prayer breakfast at St. Richard builds on decades of tradition

By Joe Lee
JACKSON – For Anthony Thomas and the guys who put on the annual St. Richard men’s prayer breakfast on the Monday of Holy Week, an especially early start to the day carries on a tradition that’s in its seventh decade. It’s the opportunity to see old friends, make new ones, and grow in their faith together that keeps these men coming back.

“I moved to the parish in 1974 and got involved in the breakfast the following year,” Thomas said after a group of over 40 enjoyed a tasty, balanced meal of pancakes, sausage, fresh fruit, orange juice and coffee in Foley Hall. “We’ve had only four chefs over the years: Joe Daschbach, Jay Potter, David Evers and Mike Prince, who’s doing it now. We’re fortunate to have had people who can cook that know what they’re doing.”

Bishop Kopacz, Anthony Thomas and Father Joe Tonos

Bishop Joseph Kopacz, who celebrated a pre-dawn Mass while Thomas and his team of volunteers were next door preparing the meal, also spoke at the breakfast and described his recent pastoral trip to Ireland, a journey that included visits with retired Irish priests who pastored in the Diocese of Jackson and family members of deceased priests who pastored here.

“The presiding bishop has always been the Holy Week speaker since I’ve been in charge of the speakers, which goes back to the mid-1980s,” Thomas said. “I think anybody you talk to who attends enjoys the fellowship as much as the message, but we don’t ever want to book a speaker and then have a small crowd. We enjoy Bishop Kopacz, and there’s always a good turnout for him. We had a nice group this morning.”

“For me to be here as bishop, with the privileged position to be able to go to Ireland, represent the diocese, visit these retired priests and offer a word of thanks and affirmation, that’s a beautiful thing,” Bishop Kopacz said. “And to come back and share the experience with (the breakfast attendees) gives them a perspective and the understanding that the church here has a lot of life. We never need to take that for granted; it’s a gift of faith that we have to keep alive.”

Bishop Kopacz noted that many of the breakfast attendees have had personal relationships for decades with the bishops he and Msgr. Elvin Sunds visited in Ireland, such as Father Michael O’Brien and Father P.J. Curley. (Visit mississippicatholic.com/category/bishop to read Bishop Kopacz’s column about the trip, “May the road rise up to meet you,” his first to Ireland since before the Covid pandemic.)

“For Anthony, this is a niche,” Bishop Kopacz said. “It requires others who are setting it up, doing the cooking. He’s an old pro; he’s up early and bringing it together.”

JACKSON – Bishop Joseph Kopacz speaks at the annual men’s prayer breakfast at St. Richard parish on Monday, April 3. (Photo by Joe Lee)

St. Richard parishioner Jeff Cook, who served as an altar server during Mass before enjoying the breakfast, was an attendee for several years before returning after the pandemic to begin helping in the kitchen. He’s one of many regulars who has known Thomas for years and finds his energy and leadership inspiring.

“If it wasn’t for Anthony, I wouldn’t be here,” said current breakfast chef Mike Prince. “I’ve cooked for fifteen years, and the breakfast is a sacrifice, but I learned to keep my head up, keep a positive attitude and trust in the Lord. The first one I ever did, (Foley Hall) was brand new. I forgot to turn the oven hoods on, and in the prayer before breakfast, all the fire alarms in the building went off.

“We always pray before we serve, and God always seems to blaze the trail. In our heyday, 50 was a good crowd, but today was a good crowd. I think the breakfast is a good outreach program for the church, and a great opportunity for the men of the parish to get together to share faith, hear positive stories, and just fellowship.”