Doctrina Social Católica basada en visión de Vida Humana

Por Obispo Joseph R. Kopacz, D.D.
En 2022, la Iglesia Católica marcará el 50 aniversario del Mes del Respeto a la Vida en los Estados Unidos, un año antes de la decisión de la Corte Suprema en Roe v. Wade que continúa ensombreciendo nuestra tierra y nuestras conciencias.

En realidad, las raíces de una conmemoración más formal del respeto por la vida en el mundo moderno se encuentran en los escritos del Concilio Vaticano II. Gaudium et Spes, la Constitución pastoral de la Iglesia en el mundo moderno, proporcionó un fundamento evangélico para lo que surgiría en las décadas siguientes como los principios de la Doctrina Social Católica.

Obispo Joseph R. Kopacz

“La Iglesia, al prestar ayuda al mundo y al recibir del mundo múltiple ayuda, sólo pretende una cosa: el advenimiento del reino de Dios y la salvación de toda la humanidad. Todo el bien que el Pueblo de Dios puede dar a la familia humana al tiempo de su peregrinación en la tierra, deriva del hecho de que la Iglesia es “sacramento universal de salvación”, que manifiesta y al mismo tiempo realiza el misterio del amor de Dios al hombre. Mientras persigue este objetivo señalado de llevar la salvación a todos, la Iglesia no solo comunica la vida divina a la humanidad, sino que también refleja en cierta medida la luz de esa vida en todo el mundo. Lo hace especialmente a través de su trabajo de restaurar y realzar la dignidad de la persona humana, de fortalecer el tejido de la sociedad humana y enriquecer la actividad diaria de hombres y mujeres con un significado e importancia más profundos. La Iglesia cree que de esta manera puede hacer una gran contribución para llevar una mayor humanidad a la familia de la humanidad y a su historia.”

En esta maravillosa sección de Gaudium et Spes que se traduce como alegría y esperanza, nos sentimos inspirados a mantener nuestros ojos en la meta de la vida eterna, pero nunca apartados del mundo donde trabajamos nuestra salvación.

La dignidad de la persona humana y el tejido de la sociedad humana son parte integrante del Reino de Dios y de la misión de la Iglesia. Esto se afirma con vehemencia en las primeras líneas de Gaudium et Spes. “Los gozos y las esperanzas, las tristezas y las angustias de los hombres de nuestro tiempo, sobre todo de los pobres y de cuantos sufren, son a la vez gozos y esperanzas, tristezas y angustias de los discípulos de Cristo.”

La Doctrina Social Católica se basa en esta visión de la vida humana, la actividad diaria y nuestro destino final con los principios de solidaridad y el bien común que promueven la vida familiar, el empleo remunerado, junto con los elementos esenciales para una vida digna: alimentos, agua, atención médica, educación, vivienda y seguridad, en el contexto de la sostenibilidad de la creación de Dios.

San José, como se reflexionó anteriormente, es un modelo ejemplar de alguien que acepta la vida de madre e hijo. Volvamos a San José y la Sagrada Familia para comprender algunas de las luchas que asolan a la familia humana hoy y necesitan redención. Desde el principio, su Sí a la voluntad de Dios y el don de la vida estuvo plagado de problemas. Se emprendió un viaje agotador desde el norte de Israel hasta Belén en el sur con María a punto de dar a luz con cada rebote en el camino sobre una bestia de carga. Les esperaba la descorazonadora falta de alojamiento.

Sin embargo, su resistencia se hizo evidente en la utilización del establo para traer al Hijo de Dios a la luz del día. Ni siquiera sabemos si tuvieron tiempo de inscribirse en el censo decretado por César Augusto, porque luego de un breve respiro se dieron a la fuga para evitar el veneno asesino del rey Herodes. Las sagradas escrituras nos dicen que José y María con su recién nacido pasaron dos años en Egipto antes de poder regresar a su amada tierra natal y comenzar a construir una vida de estabilidad en Nazaret para el Hijo unigénito de Dios.

Sus primeros años juntos nos ofrecen una dirección para nuestra fe católica y el mundo moderno. Como pareja casada, tenían una profunda confianza y respeto mutuos, una base sólida para superar las dificultades y el odio. Tenían una fe viva en su Dios amoroso, evidente en su capacidad para seguir los impulsos de sus mejores ángulos para aceptar la voluntad de Dios, los unos a los otros, y la urgencia del momento. Sin embargo, con todas sus fortalezas personales y relacionales, en su vulnerabilidad tuvieron que depender de algunos en Egipto que dieron la bienvenida al extraño y les dieron un punto de apoyo para sobrevivir.

Hay una gran cantidad de personas en movimiento en nuestro mundo de hoy, por razones paralelas a las de la Sagrada Familia. A los migrantes, inmigrantes y refugiados a menudo se les despoja de todo excepto de la ropa que llevan puesta. Muchos han demostrado una capacidad de recuperación notable y han sobrevivido. Pero en su vulnerabilidad siempre existe la necesidad de que los buenos samaritanos los acompañen y se recuperen.

Extendiendo la realidad de la vulnerabilidad, damos gracias durante la conmemoración de este mes de respeto a la vida a todos los que acompañan y sirven a quienes están al borde del colapso.

Las razones pueden ser innumerables, pero el objetivo es la restauración de la dignidad humana, el fortalecimiento del tejido de la sociedad humana y la construcción de un mundo más humano. Esta es la mentalidad que conviene a los discípulos del Señor Jesús al servicio de todos los hijos de Dios.

Este es el logo en español del Mes del Respeto a la Vida 2021 que la Iglesia Católica de EE. UU. Celebró en octubre. Como parte del Año de San José declarado por el Papa Francisco, la celebración de este año “destaca el ejemplo de ese gran santo”, dijo una declaración del 27 de septiembre del arzobispo Joseph F. Naumann de Kansas City, Kansas, quien es presidente de la Comité de Actividades Pro-Vida de la Conferencia de Obispos Católicos de los Estados Unidos. (Courtesy RespectLife.org)

Tome Nota

Vírgenes y Santos

Día de Todos los Santos. Lunes, nov. 1

Día de los Fieles Difuntos. Martes, nov. 2

San Martín de Porres. Miércoles, nov. 3

Fin Horario de Verano. Domingo, nov. 7

Virgen de los Treinta y Tres. Lunes, nov. 8

Día de los Veteranos. Jueves, nov. 11

Señora del Rosario de Chiquinquirá. Jueves, nov. 18

Señora de la Divina Providencia. Viernes, nov. 19

Presentación de la Santísima Virgen María. Nuestra Señora del Quinche. Domingo, nov. 21

Nuestro Señor Jesucristo, Rey del Universo. Santa Cecilia y Nuestra Señora de la Paz del Salvador. Lunes, nov. 22

Día de Acción de Gracias. Viernes, nov. 26

San Andrés. Martes, nov. 30

Ciudadanos del cielo en Tupelo y Vardaman

Por Berta Mexidor
JACKSON – Las experiencias y enseñanzas de dos madres estuvieron en el centro de la celebración de la Semana Nacional de la Migración en St. James Tupelo, el jueves 24 de septiembre. La Sra. Oyafemi le enseñó a su pequeño niño que cuando alguien le pregunta ¿de dónde eres? debes responder “Soy un ciudadano del cielo”; A 6.375 millas y 25 años de Nigeria, una madre en México, escapó a los Estados Unidos de un esposo abusivo en México con una niña, ocultándole, durante años, la verdadera situación de ciudadanía de ella.

Con la moderación de Fran Lavelle, director diocesano de la Oficina de Formación en la Fe, un panel de diferentes ponentes expuso su interacción, experiencias a la exposición de migrantes y refugiados que incluyó al Padre Clem Oya, director del Ministerio Intercultural, hijo de la madre nigeriana que lo hizo. enamorarse de las enseñanzas de la Biblia, y Guadalupe Meyer, la niña que vino sin visa, hoy beneficiaria de DACA, solo porque la intuición de su madre, en su desesperación, le dijo “eres ciudadana del cielo”.

Durante al menos cincuenta años, la Iglesia Católica en los Estados Unidos ha estado celebrando y reconociendo la creciente población de inmigrantes, víctimas y sobrevivientes de la trata de personas y refugiados, no solo en el país sino en todo el mundo.

Durante el NMW, cada año, la Diócesis crea una actividad diferente que incluye oraciones, educación y acciones de solidaridad hacia inmigrantes y refugiados. La Diócesis de Jackson se encuentra entre ellos, celebrando la diversidad que los migrantes aportan a la Iglesia Católica a un estado donde los católicos son un grupo religioso minoritario, y donde Catholic Charities llama la atención no solo a la población católica sino también a la población desatendida, incluidos los migrantes y refugiados, sin mirar a su afiliación religiosa.

TUPELO – Parroquianos de todas las edades y orígenes se reunieron para intercambiar en persona con varios oradores en St James Tupelo el jueves 24 de septiembre a instancia de los coordinadores de la Semana Nacional de la Migración, de la cual Tupelo se ha convertido en la sede diocesana y que ha atraído por ya varios años a personalidades locales y nacionales. (Fotos de Berta Mexidor)


TUPELO. Una luz de esperanza en el norte
Para el alto porcentaje de hispanos que asintieron en el Decanato cinco, el liderazgo apasionado del Padre Murphy en St. James y Danna Johnson, para Catholic Charities en el área, St. James es el centro durante años del NMW en la diócesis. Han acogido a varios visitantes, conferencistas nacionales y locales, exponentes del arduo trabajo con los migrantes promoviendo una cultura cálida de acogida a los extranjeros.

Este año, como de costumbre, por invitación del Padre Tim Murphy, el ministerio hispano de la parroquia, srepresentado por Raquel Thompson y Danna Johnson, Coordinadora de Caridades Católicas de Vardaman, y Coordinador del Ministerio Hispano de San Cristóbal Pontotoc, la Semana Nacional de la Migración se celebró nuevamente en St. James. En esta ocasión el público, principalmente angloparlantes, tuvo la oportunidad de intercambiar con el padre Clem Oya, Guadalupe Meyer, activista por los migrantes, y Josh Blackmon, joven empresario, y el abogado Brad Prewitt, vicepresidente de Circadence, una empresa de ciberseguridad, ambos reconocidos. en la comunidad de Tupelo y miembros activos de la parroquia de St. James.

Antes de la sesión, el padre Tim dirigió la lectura de la oración a la hermana Thea Bowman, sierva de Dios y promotora del entendimiento intercultural, quien “en tiempos de intolerancia e ignorancia, traigo sabiduría, conciencia, unidad y caridad”. Al finalizar el encuentro, dos presentaciones de danzas folclóricas destacaron la Herencia Hispana, que la parroquia celebró el pasado domingo 19 de septiembre.


VARDAMAN. Batatas–Boniatos: directos desde el campo a tu corazón
Orgullosos de su tierra, tradiciones y hospitalidad, los líderes religiosos y comunitarios se reunieron la mañana del 25 de septiembre en el Vardaman Catholic Charities Center para conversar con el padre Clem Oya, director de la oficina del Ministerio Intercultural de la Diócesis.

La audiencia conoció las ideas y declaraciones del Papa sobre los migrantes y refugiados, bien explicadas por el padre Clem Oya, y sobre las luchas de los niños traídos al país por sus padres, sin documentos. Los soñadores, representados por Guadalupe Meyer, quien explicó el dilema de los jóvenes como ella siente que Estados Unidos es su propio país porque no conocen otro, y cómo se siente una contradicción nacional – extranjero.

A última hora de la tarde el padre, Clem Oya y Lupe se reunieron con un grupo de mujeres que se reúne regularmente para crear actividades que las unan y en las que puedan ayudarse mutuamente.

La Junta de Caridades Católicas con el liderazgo de Danna Johnson ha puesto a Vardaman en el punto culminante diocesano y nacional con el trabajo silencioso y tenaz con los migrantes, encargados de poner las batatas en la mesa de los misisipianos y a nivel nacional. Vardaman está atrayendo a inmigrantes en busca de trabajo y superveniencia. Los lugareños ven a los migrantes ir y venir y también están tratando de comprender el fenómeno y cómo algunos extranjeros sienten y comparten el mismo amor por los campos y la gente en Vardaman.

El Centro de Apoyo al Migrante de Caridades Católicas entre sacerdotes, monjas, personal de parroquias y líderes comunitarios de toda la diócesis, trabajan en la misión de recibir a Jesús en los rostros de cada extranjero que ayudan a establecerse en la nueva tierra llena de esperanza y libertad.

Obispo Kopacz abrió Sínodo Diócesano en Misa del domingo 24 de octubre

Por Fran Lavelle
JACKSON – El Papa Francisco comenzó el Sínodo el fin de semana del 9 al 10 de octubre con una sesión de apertura y una Misa.

El obispo Kopacz abrirá el Sínodo en la diócesis de Jackson con una Misa en la Catedral de San Pedro, el domingo 24 de octubre a las diez de la mañana.

Entonces, ¿qué es un Sínodo?, te preguntas.

El Vaticano II estableció un Sínodo de Obispos, descrito en el Código de Derecho Canónico de 1983 como un grupo de obispos seleccionados de diferentes regiones del mundo que están llamados a abordar un tema en particular. Por ejemplo, se puede convocar un sínodo para considerar cuestiones relacionadas con la actividad de la iglesia en el mundo.

Desde mediados de la década de 1960, cuando se estableció el Sínodo de los Obispos, se han invocado una treintena de sínodos. Muchos han pasado desapercibidos. Sin embargo, el Papa Francisco ha dado nueva vida al Sínodo de los Obispos al considerar cuestiones relativas a la iglesia joven, las familias, la Amazonía y otros temas de actualidad.

Es fundamental para entender lo que el Sínodo está reconociendo y lo que no es. No es un proceso de planificación pastoral, ni es una sesión libre de quejas. Es una oportunidad para que el pueblo de Dios oremos juntos y nos preguntemos a nosotros mismos como individuos y dentro de la comunidad de nuestra iglesia, adónde estamos llamados en nuestro viaje juntos. Proporciona un momento en el tiempo para que la iglesia universal observe los problemas más importantes que enfrenta el pueblo santo de Dios y se pregunte cómo debemos responder al encarnar el Evangelio.

Fase uno del sínodo sobre sinodalidad.

Es la fase diocesana que comienza este mes y concluirá en abril de 2022. En la fase diocesana, recopilaremos aportes de parroquias locales, movimientos laicos, instituciones religiosas, escuelas, universidades, comunidades ecuménicas y otros grupos.

En la fase diocesana, recopilaremos aportes de parroquias locales, movimientos laicos, instituciones religiosas, escuelas, universidades, comunidades ecuménicas y otros grupos. El manual de la USCCB en preparación para el sínodo describe el viaje sinodal como una experiencia de “escucha y discernimientos auténticos en el camino de convertirnos en la iglesia que Dios nos llama a ser”. Continúa afirmando que, “El Proceso sinodal es ante todo un proceso espiritual. No es un ejercicio mecánico de recopilación de datos ni una serie de reuniones y debates. La escucha sinodal está orientada al discernimiento.”

Es nuestro papel como líderes diocesanos llamar a través de la oración y el discernimiento hacia dónde nos está guiando el Espíritu Santo.

Amasar la fe: Sínodo del Papa sobre sinodalidad para recopilar información de las parroquias locales
Si has seguido el pontificado del Papa Francisco, sabes que está profundamente arraigado en su formación jesuita. Es fundamental para la formación de un jesuita comprender el papel del discernimiento en la vida de la iglesia y de todo el pueblo de Dios.

En los últimos años, ha escrito tres documentos actuales que invitan a los fieles a reflexionar sobre el papel de la iglesia en el mundo de hoy: Christus Vivit es una exhortación apostólica “a los jóvenes y al pueblo de Dios” escrita como resumen del Sínodo sobre los jóvenes; Fratelli Tutti, una carta encíclica sobre la fraternidad y la amistad social y Let Us Dream (Déjennos soñar), un modelo inspirado para un futuro mejor para todos, especialmente considerando el impacto devastador de la pandemia en los pobres. El deseo del Papa de escuchar amablemente a todos los grupos demográficos, todas las edades, todas las personas es indicativo de su creencia de que el funcionamiento de la iglesia no es un proceso clandestino que ocurre a puerta cerrada. El Papa Francisco está pidiendo a los líderes de la iglesia que abran bien los brazos, los oídos y el corazón para escuchar la voz profética del pueblo de Dios. El cardenal Mario Grech lo dijo muy bien: “El Concilio Vaticano II enseña que el Pueblo de Dios participa en el oficio profético de Cristo. Por lo tanto, debemos escuchar al Pueblo de Dios, y esto significa salir a las iglesias locales.”

Y Usted, ?qué puede hacer?

Usted puede empezar a orar por sabiduría y entendimiento. Comience a orar ahora por un fervor renovado para que los corazones y las mentes de las personas en todas partes sean conducidos de regreso al corazón y la misión de Cristo.

Cuando su parroquia se reúna para escucharse unos a otros, que se fortalezcan con el conocimiento de que su voz es importante.

(Fran Lavelle es el Director de Formación en la Fe de la Diócesis de Jackson).

El papa Francisco celebra misa en la Basílica de San Pedro en el Vaticano el 10 de octubre de 2021 para abrir el proceso que conducirá a la asamblea del Sínodo mundial de los obispos en 2023 (Foto CNS/Remo Casilli , Reuters)

El Sueño de Lupe

Por Berta Mexidor
JACKSON – Muchas niñas, principalmente, mexicanas y de todo el continente americano, son nombradas en honor a María de Guadalupe. Guadalupe Meyers, no es la excepción.
Su madre trajo a Lupe, como todos le llaman, a Estados Unidos y luego aquí, ella se enteró de su complicada realidad, compartida con miles de otros jóvenes.
Su madre escapó de México de una relación matrimonial abusiva. Como muchas mujeres, tomó la decisión de poner tierra por medio y sacar a sus hijos de una peligrosa situación. En ese entonces, ella vio su salvación al venir y establecerse en California, Estados Unidos con Guadalupe, de solo un año de edad. Años después conoció a su esposo, con quien hasta ahora comparte su vida y quien se convirtió en el jefe de familia y en el padre que Lupe conoció.
Cuando era solo una adolescente, Lupe, como todos los demás adolescentes en Estados Unidos, quiso tener su licencia para manejar, como lo estaban haciendo todos los jóvenes de su clase de High School, allá en California. Cuando le pidió a su madre por sus documentos para comenzar los trámites, esta le explicó que su situación no era la misma que la de otros niños, que Lupe, por no tener documentación, no solo no podía manejar, sino que no podía tener una licencia de conducción. A diferencia de los demás estudiantes de esta edad, su padre o su madre seguirían llevándola y trayéndola de la escuela.

TUPELO – María de Guadalupe siempre acompaña a Guadalupe (Lupe) Meyers, desde el origen de su propio nombre y durante toda la experiencia de ser una soñadora DACA. En la foto aparece en una presentación, durante la Semana Nacional de la Migración, en St. James Tupelo el jueves 24 de septiembre. (Fotos de Berta Mexidor)

Es fue el primer choque con una realidad desconocida, que para un joven es inexplicable y extraña. Poco después vendría la segunda cruda situación. Lupe es una estudiante excepcional y por lo tanto tenía intenciones de llegar a la Universidad. Sus notas eran una de las más altas de su clase y por ende podía recibir una beca de cualquier Universidad. Cuando comentó esto con sus padres, en medio del proceso de solicitar acceso a la Universidad, se enteró que ella no tenía documentación para solicitar financiamiento estatal (Financial Aid) o regularmente una Beca (Scholarship), por lo que sus padres le dijeron que ellos estaban comprometidos a pagar por su carrera universitaria. Durante sus años de estudios universitarios, Lupe trabajó de mesera y limpiando casas y oficinas para completar el dinero de sus estudios.
Lupe comenzó la universidad en California, obteniendo becas académicas por sus notas, carrera deportiva y comportamiento, que le permitieron obtener el Máster de Relaciones Internacionales en 2010.
Después de graduada ha trabajado siempre con organizaciones no gubernamentales (NGO) en busca de ayudar a los demás. Este trabajo de activista recoge varios logros, considerados por ella como pequeños, pero muy importantes para los que recibieron y aún siguen recibiendo sus beneficios. Por ejemplo, campañas locales en San Jose y Oakland, California, donde se logró que la policía no llevara a prisión a indocumentados por infracciones leyes de
tráfico, que solo merecían una multa; obtener transporte para niños indocumentados a las escuelas y transporte público gratis para personas de la tercera edad ”seniors”.
Final, más que feliz, esperanzador
Hasta hoy, según reportes de CNA “DACA ha permitido que unos 700.000 jóvenes calificados trabajen, vayan a la universidad, obtengan seguro médico y una licencia de conducir y no se enfrenten a la deportación.” aunque el programa comenzó en 2012, nueve años más tarde, muchos de ellos siguen esperando la solución legal final, que ponga fin a tanta incertidumbre y sufrimiento.
El destino de estos jóvenes se ha convertido en un reto que muchos han vencido, haciéndolos mejores seres humanos y atrayendo a su causa, en solidaridad, a muchos seres humanos más.
En 2019, Lupe se casó con el abogado Max Lewis Meyers, quien además tiene otra historia fascinante de dedicación y ayuda al ser humano, a la que le dedicaremos su momento en Mississippi Católico. El abogado Meyers está a cargo además del proyecto de ayuda gratuita a jóvenes DACA, desde el Centro de Justicia de Mississippi. La pareja se mudó a Jackson compartiendo el amor a las personas indocumentadas y a la comunidad inmigrante en general, en aras de ayudar de una manera y otra.
Lupe, además de estudiar para alcanzar un doctorado en Estudios Latinoamericanos en Tulane University de Nueva Orleans, dedica parte de su tiempo a trabajar para una NGO, a participar en diferentes actividades donde pueda explicar las experiencias de haber sido una soñadora DACA y a ayudar a otros jóvenes DACA, a enfrentar los obstáculos que hay en Mississippi para ellos.

OAKLAND – Lupe ha trabajado en varias organizaciones sin fines de lucro y en el departamento de educación de la alcaldía de Oakland, en California. En la foto, Lupe intercambia con niños, muchos de ellos indocumentados. Después de varias campañas se logró un decreto local para que las escuelas públicas ofrecieran transportación gratuita para estos niños.

Por sus investigaciones en la universidad ha podido acercarse a la historia de los inmigrantes en Mississippi y llegar a descubrir que la historia de los braceros mexicanos en este estado no es reciente, data en documentos de más de cien años, de cuando los colonos necesitaron mano de obra para colectar el algodón que los esclavos, recién liberados, no recogerían más. Desde ese entonces el tema de las hoy visas H2-A para trabajar temporalmente tiene una historia llena de sufrimiento, vicisitudes y del éxito de muchas familias de algunos de esos braceros, muchos de los cuales decidieron quedarse, fundar una familia y prosperar en un estado hostil al extranjero, como lo es Mississippi, en comparación con otros estados de la nación. La paradoja es que Mississippi, por estar en el sur, es un estado más cerca de la inmigración que los estados del norte y por ser un estado agrícola, necesita de mano de obra para sembrar y recoger la cosecha.
Lupe ha conversado con mucho de ellos, ha visto como muchos mexicanos como ella, hablan como Misisipianos, ha experimentado como personas de tres o más generaciones de inmigrantes quieren a la tierra de Mississippi tanto como las familias que ya van por más de siete generaciones.
Lupe no ha completado su sueño, ahora éste es escribir un libro sobre los inmigrantes de Mississippi, no sólo sobre las dificultades, sino sobre cómo se han sobrepuesto a las dificultades y han logrado ser exitosos en estas tierras. Lupe declara, “escribir este libro, esta gran historia de los Hispanos en Mississippi, es más que un reto académico, es un tema personal”.

Debate y votación sobre documento eucarístico encabezará agenda de próxima reunión de obispos de EE. UU.

Por Julie Asher
WASHINGTON (CNS) – Cuando los obispos de Estados Unidos se reúnan para su asamblea de otoño en Baltimore del 15 al 18 de noviembre, ésta será la primera reunión en persona del cuerpo completo de obispos desde noviembre de 2019.
La pandemia de COVID-19 forzó la cancelación de la reunión de primavera de junio de 2020, asamblea de otoño de noviembre de 2020 y la reunión de primavera de junio de 2021 y que se hicieron en formato virtual.
Encabezando la agenda de la reunión habrá un debate y votación sobre un documento propuesto sobre la Eucaristía, “El misterio de la Eucaristía en la vida de la Iglesia” y sobre una iniciativa de avivamiento eucarístico.
Parte del ímpetu para el trabajo de los obispos en este documento y un avivamiento eucarístico para aumentar la comprensión y conciencia de la Eucaristía por parte de los católicos fue un estudio de Pew en el otoño de 2019 que mostró que solo el 30% de los católicos “tienen lo que podríamos llamar un comprensión de la presencia de Cristo en la Eucaristía.”
El avivamiento eucarístico se iniciaría en la fiesta del Corpus Christi en junio de 2022. El esfuerzo de tres años incluirá eventos a nivel diocesano como procesiones eucarísticas en todo el país junto con adoración y oración.Esto culminaría en un Congreso Eucarístico Nacional en el verano de 2024.
La asamblea de Baltimore de la Conferencia de Obispos Católicos de los Estados Unidos comenzará con un discurso del arzobispo Christophe Pierre, nuncio papal en los Estados Unidos. Los obispos también escucharán al arzobispo José H. Gómez de Los Ángeles, presidente de la USCCB. La agenda también incluye: un informe del Consejo Asesor Nacional, un grupo compuesto por religiosos y laicos principalmente para consultas sobre temas de acción e información.
Otros puntos de acción en la agenda que requieren debate y votación serán:
– Actualización de las “Directrices de inversión socialmente responsable”; una propuesta para agregar a Santa Teresa de Calcuta al “Calendario Adecuado para las Diócesis de los Estados Unidos” como un memorial opcional el 5 de septiembre; una resolución sobre informes financieros diocesanos; nuevas versiones en español e inglés de la Orden de Iniciación Cristiana de Adultos; una traducción de “Sagrada Comunión y Adoración del Misterio Eucarístico fuera de la Misa”; “Estatutos Nacionales del Catecumenado” en inglés y español y el presupuesto 2022 de la USCCB.
– Votación por un tesorero electo para la USCCB, así como por los presidentes electos de cinco comités permanentes: Clero, Vida Consagrada y Vocaciones; Adoración Divina; Justicia Doméstica y Desarrollo Humano; Laicado, matrimonio, vida familiar y juventud; y Migración.
– Votación por los miembros de la junta de Catholic Relief Services, la agencia de ayuda y desarrollo de los obispos de EE. UU. en el extranjero.
– Elección de un nuevo secretario general de la USCCB.
– Consulta a los obispos sobre las causas de santidad de Charlene Marie Richard y Auguste Robert “Nonco” Pelafigue. Ambos tienen el título de “Siervos de Dios” de la Diócesis de Lafayette Louisiana, donde se ha inaugurado oficialmente sus causas de santidad.
– El Sínodo de los Obispos 2021–2023.
– El trabajo de CRS, Catholic Charities USA y Catholic Legal Immigration Network Inc., o CLINIC.
– El 50 aniversario de la Campaña Católica para el Desarrollo Humano, el programa nacional contra la pobreza de los obispos de EE. UU.
– El proceso “Caminando juntos” de diálogo y encuentro intercultural.
– La aplicación e implementación del “Marco Pastoral para el Ministerio del Matrimonio y la Vida Familiar en los Estados Unidos: Llamados a la Alegría del Amor”.
– La iniciativa “Caminando con mamás necesitadas” del Comité de Actividades Pro–Vida de la USCCB.

(Las sesiones públicas de la asamblea general se transmitirán en www.usccb.org/meetings y en las redes sociales pueden usar el hashtag # USCCB21; en Twitter, @USCCB; en Facebook, www.facebook.com/usccb; e Instagram, https://instagram.com/usccb.)

Mundo

Los fieles llevan una estatua de María y el Niño Jesús durante una Misa frente a la Capilla del Pino de la Virgen en la isla canaria de La Palma, España, el 19 de octubre de 2021. La gente rezaba para que el volcán Cumbre Vieja pare la erupción. Corrientes de lava al rojo vivo han engullido casi 2,000 acres de tierra, destruyendo casi 2,000 edificios y desplazando a más de 6,000 personas desde que comenzó la erupción el 19 de septiembre (foto del CNS / Susana Vera, Reuters)
Trabajadores forenses y empleados de una funeraria llevan un ataúd, frente a una lápida con la imagen de Nuestra Señora de Guadalupe, antes de enterrar un cuerpo no reclamado, durante el entierro masivo de víctimas de violencia en el cementerio de San Rafael en Ciudad Juárez, México, 14 de octubre de 2021 (Foto del CNS / José Luis González, Reuters)
Migrantes centroamericanos caminan en una carretera en una caravana en Tapachula, México, el 24 de octubre de 2021, mientras se dirigen a la Ciudad de México para solicitar asilo y estatus de refugiado. (Foto del CNS / José Torres, Reuters)
Durante el Congreso Eucarístico Diocesano, en la foto se ven las ostias en bandejas, antes de la Misa del 8 de octubre de 2021, en el Centro de Convenciones Renasant de Memphis, Tennessee. (Foto de CNS, Karen Pulfer Focht)

La Esquina del Papa

Reunión de papa y Biden será oportunidad para abordar preocupaciones compartidas

Por Dennis Sadowski

Catholic News Service

La próxima audiencia del presidente Joe Biden con el papa Francisco presenta una oportunidad para que el pontífice inspire al líder estadounidense a trabajar más diligentemente para encontrar soluciones a preocupaciones compartidas como el cambio climático, la distribución de la vacuna COVID-19, y la reducción de la pobreza y los conflictos en países vulnerables, expresó un ejecutivo de Catholic Relief Services.

“Se tendrá los dos micrófonos más altos de la comunidad internacional”, señaló Bill O’Keefe — vicepresidente ejecutivo de misión, movilización e incidencia ciudadana de la agencia de desarrollo global y ayuda humanitaria de los obispos de Estados Unidos — sobre la reunión del 29 de octubre en el Vaticano.

“Espero que el Santo Padre le hable como persona y como católico y que la guía del Santo Padre sea muy útil”, dijo O’Keefe a Catholic News Service el 21 de octubre.

“El Santo Padre, con su profundo liderazgo, puede ayudar a movilizar a Estados Unidos, inspirar a la administración, hacer más en esos temas críticos y trabajar juntos, incluso donde hay diferencias obvias entre la iglesia y la administración de Biden. La oportunidad de trabajar juntos sobre estos problemas globales críticos es realmente fundamental para progresar”, acotó.

Biden, el segundo presidente católico de la nación, planea reunirse con el papa Francisco un día antes de asistir a la cumbre de dos días de líderes del G-20 en Roma. Ellos dos se habían encontrado previamente en el Vaticano en 2016, cuando Biden era vicepresidente y habló en una conferencia sobre la investigación de células madre adultas allí.

Sin embargo, su primer encuentro fue en 2015, cuando el Sumo Pontífice asistió al Encuentro Mundial de Familias en Filadelfia.

La primera dama, Jill Biden, acompañará a su esposo en la audiencia del 29 de octubre con el papa.

O’Keefe reconoció que existen diferencias entre el papa y el presidente, más notablemente sobre el aborto. Biden apoya el aborto legal, mientras que la enseñanza católica se opone a quitar cualquier vida humana: desde la concepción hasta la muerte natural.

Sin embargo, él señaló que las diferencias no deberían impedir que la reunión siga adelante. Citó la encíclica del papa de 2020, “Fratelli Tutti, sobre la fraternidad y la amistad social”, como un motivo de esperanza.

“El mensaje de ‘Fratelli Tutti’ es de encuentro y de hermandad, por lo que decir la verdad al poder requiere hablar con el poder”, explicó O’Keefe. “Lo que eso significa es tener el coraje de hablar respetuosamente con las personas con las que no estás de acuerdo”.

O’Keefe espera que los dos líderes tengan mucho que discutir.

El papa, por escrito y en comentarios públicos, ha abordado cada vez más el cambio climático, cómo proteger la creación, la creciente desigualdad económica, y el conflicto casi constante de bajo nivel que ha desplazado a cientos de miles de personas y ha cobrado cientos de vidas en África y Asia.

O’Keefe dijo que los mensajes del Sumo Pontífice se han centrado en las necesidades urgentes de las personas más vulnerables del mundo. El papa ha instado en repetidas ocasiones que se tomen medidas para mitigar el cambio climático y ayudar a las comunidades a adaptarse a dicho cambio.

“En todos los lugares en los que trabajamos, el clima está afectando a los más vulnerables”, manifestó O’Keefe. “El Santo Padre es la persona más apropiada para entregar ese mensaje a Biden”.

El funcionario de CRS también señaló que Estados Unidos y el Vaticano comparten preocupaciones sobre un mejor acceso a las vacunas contra el COVID-19 en países pobres. Las naciones ricas y desarrolladas han tenido una distribución generalizada de vacunas, mientras que las naciones pobres — particularmente en África — han recibido envíos de dosis relativamente pequeños.

O’Keefe indicó que, si bien Estados Unidos acordó una exención de los derechos de patente para las diversas vacunas, el proceso “no avanza lo suficientemente rápido” en la Organización Mundial del Comercio. Ahí es donde el papa Francisco puede intervenir, acotó.

“Se necesita un impulso importante en la OMC. Creo que asegurarnos de que la administración de Biden, con los socios europeos, lo haga posible para que podamos cumplir con los compromisos de Estados Unidos de garantizar que las personas más vulnerables de todo el mundo obtengan las vacunas que les corresponden”, expresó O’Keefe.

Con respecto a los conflictos que han perturbado las vidas de cientos de miles de personas en todo el mundo, O’Keefe dijo que espera que el papa aliente a Estados Unidos a apoyar de manera más activa las conversaciones cara a cara que pueden conducir a la paz y la reconciliación en los lugares conflictivos.

La Iglesia Católica, a través de agencias que son miembros de Caritas Internationalis, incluyendo CRS, ha ayudado a negociar la paz en algunas regiones, particularmente en el Sahel, un área de 1.1 millones de millas cuadradas al sur del árido Sahara, que se extiende desde el Océano Atlántico en el oeste hasta el Mar Rojo en el este. Hogar de aproximadamente 84 millones de personas, la región ha sufrido durante años conflictos arraigados en diferencias tribales y religiosas.

O’Keefe dijo que crear conciencia sobre los conflictos, desmilitarizar la política en la región e impulsar la ayuda humanitaria puede conducir a la paz. Nuevamente, explicó, el papa puede enfatizar esas preocupaciones a Biden, alentando a Estados Unidos a asumir un papel más importante en la búsqueda de soluciones que prioricen las necesidades de personas vulnerables.

Además de “Fratelli Tutti”, la encíclica del papa Francisco “Laudato Si’, sobre el cuidado de nuestra casa común” proporciona la base para cualquier mensaje entregado a Biden, según O’Keefe.

“Esta es la misión de la iglesia”, dijo.

“El papa puede instar al presidente seguir trabajando con el Congreso para cumplir compromisos críticos”, continuó O’Keefe. “Agregar su fuerte perspectiva moral y pastoral junto con la política ayudará a algunos miembros del Congreso a entender esto de una manera en la que vean que estamos hablando de personas, no de ideología, y estamos hablando de necesidades humanas donde el Congreso de Estados Unidos y el pueblo estadounidense pueden responder con solidaridad”.

Teresa de Ávila, santa de nuestro tiempo y de todos los tiempos

Reflexion sobre la vida

Por Melvin Arrington

A lo largo de los siglos, la iglesia ha producido numerosas santas mujeres llamadas Teresa, entre ellas Teresa de Calcuta (Madre Teresa), Teresa Benedicta de la Cruz (Edith Stein), la santa francesa Teresa de Lisieux (la Pequeña Flor) y la precursora de todas ellas, Teresa de Ávila.

Mi esposa, Terry, cuenta una historia fascinante sobre cómo fue nombrada. Su santa madre, Stella, tenía una devoción especial por la Pequeña Flor, una que le había transmitido su madre. Cuando era una niña, Stella se enfermó gravemente y entró en coma. Su madre rezó a Therese pidiendo un milagro. Algún tiempo después, Stella recuperó la conciencia y preguntó: “¿Dónde está la dama de las flores?” Parece que había experimentado una visión del santo francés en una pose icónica.

Cuando nació Terry, Stella tenía la intención de ponerle el nombre de Therese, pero de alguna manera el nombre en el certificado de nacimiento aparecía como “Teresa”. Entonces, resulta que su verdadero homónimo no es la santa francesa, sino la española, Teresa de Ávila.

Melvin Arrington

¿Intervención divina? ¿Quién sabe? Pero sí sé que Terry se especializó en español en la universidad y tuvo una carrera maravillosa como profesora de español.

Santa Teresa de Ávila (1515-1582) fue canonizada en 1622 y recibió el título de “Doctora de la Iglesia” en 1970, siendo la primera mujer en ser designada así. Ella es mi santa favorita de octubre, día festivo -15 de octubre, principalmente por su personalidad vivaz, las cualidades convincentes de sus escritos místicos y la forma en que logró, en el espíritu de Santo Domingo, un equilibrio entre la vida activa y la contemplativa.

En una época en la que las mujeres solían permanecer en un segundo plano, Teresa se lanzó con valentía a la vanguardia de la vida española. Era hermosa, talentosa y encantadora, además de astuta, firme y decidida. Tenía habilidades de organización asombrosas y fue bendecida con inteligencia, sentido común, buen humor y un ingenio rápido, como se ve en la siguiente anécdota.

Cuando Teresa se disponía a entrar a la Orden Carmelita, un caballero admirador la ayudó a subir al carruaje. Para dar un paso al frente, se levantó un poco la falda y, al hacerlo, reveló sin darse cuenta la parte inferior de la pierna, una exposición que el joven no pasó por alto. Volviéndose hacia él, dijo: “Adelante, échale un vistazo porque es la última vez que lo verás.”

Desafortunadamente, Teresa estaba constantemente plagada de enfermedades graves, incluidas tuberculosis

y malaria. A los 24 años se volvió cataléptica y durante tres días no mostró signos de vida. Las monjas sellaron sus párpados con cera, envolvieron su cuerpo en un sudario y le prepararon una tumba. Pero cuando vinieron a llevarla para el entierro, se despertó. La recuperación completa de esta aflicción tomó muchos meses.

Al final de su vida, Teresa recordó todos estos episodios de enfermedad y dolor y concluyó que el sufrimiento fue enviado por Dios para acercarla más a Él. A pesar de estas dolencias, mantuvo su característico sentido del humor, como se ve en el comentario: “Bueno, Señor, si así es como tratas a tus amigos, no es de extrañar que tengas tan pocos.”

Santa Teresa soportó dieciocho años de sequedad espiritual en el convento hasta que, alrededor de los 41 o 42 años, experimentó una “segunda conversión”. Después, ya no esperaba la frivolidad y las visitas sociales que tanto habían ocupado su juventud. La nueva Teresa ahora se dedicaría a la oración y al recogimiento mental, lo que implica desapegarse de las preocupaciones del mundo, volverse hacia adentro y enfocarse en la presencia de Dios. Sumergiéndose en el nivel más profundo de la oración, a menudo recibía mercedes (favores) de Dios en forma de visiones, locuciones y raptos. Por supuesto, algunos sospecharon de estos como obras del diablo, pero Teresa no se inmutó.

Con el deseo de vivir bajo una regla más estricta, que permitiera más tiempo para la contemplación, Teresa emprendió su proyecto insignia: la reforma de la Orden Carmelita. Observando una laxitud y ausencia de disciplina en el convento, trabajó sin ayuda con el objetivo de restaurar la Orden a su gobierno primitivo. La reforma fue conocida como las Carmelitas Descalzas, aunque las hermanas rara vez iban sin zapatos, por lo general usaban sandalias toscas.

Teresa comenzó estableciendo San José en la ciudad de Ávila y luego viajó por toda España fundando un total de dieciséis conventos, a menudo en compañía de San Juan de la Cruz, quien ayudó a difundir la reforma también a los frailes. A pesar de la oposición de algunas de las hermanas y varios clérigos de alto rango, ella se mantuvo dedicada a este proyecto y finalmente se impuso.

Hoy en día, Teresa es mejor recordada por dos escritos místicos, Castillo interior y el camino de la perfección, y una autobiografía espiritual, en la que escribe con franqueza sobre la mala salud, las luchas en la oración, la devoción a la vida interior y las experiencias de unión mística. El estilo de escritura es natural y espontáneo, pero a menudo divagante, salpicado de digresiones y difícil de entender. Sin embargo, aquellos que se esfuercen por leer estas obras serán recompensados ​​con creces.

Y así, hoy podemos considerar a Teresa como una santa ejemplar en varios niveles. Ella es claramente un modelo para aquellos dedicados a la renovación y una vida de oración más profunda, pero también alguien a quien aquellos que sufren de enfermedades y dolores pueden orar y apoyarse. Mujeres de todas las edades pueden inspirarse en la vida y los escritos de esta monja española. Y para todos los que creen que el gozo es una parte integral de la fe, nos unimos a ella para decir: “Dios mío, líbranos de los santos de rostro amargado.”

Nuestras vidas son obra de amor en Dios

Por Obispo Joseph R. Kopacz, D.D.
Después que Dios puso el mundo en movimiento, mediante la obra de la creación, formó al hombre y la mujer del polvo de la tierra a la imagen y semejanza divina y les confió la tarea de desarrollar esta gran obra.
Entonces y ahora, Dios quiere que no perdamos de vista su presencia divina cuando usemos nuestros talentos para construir un mundo que dé gloria al creador, dignidad a la vida humana en todas partes y un asombro profundo por la belleza de nuestro planeta.
Para mayor motivación e inspiración, nosotros, como discípulos del Hijo de Dios, recordamos las palabras de la Sagrada Escritura que proclaman, “En él Dios creó todo lo que hay en el cielo y en la tierra, tanto lo visible como lo invisible, así como los seres espirituales que tienen dominio, autoridad y poder. Todo fue creado por medio de él y para él. Cristo existe antes que todas las cosas, y por él se mantiene todo en orden.” (Colosenses 1: 15-17) A través de la fe sabemos que el amor es nuestro origen, el amor es nuestro llamado constante y el amor es nuestra plenitud en el cielo.
También sabemos que mientras vivamos hay mucho por hacer. Quizás este Día del Trabajo nos recuerda más que nunca que a lo largo de nuestras vidas el trabajo de construcción y reconstrucción es constante. Recuerde las palabras aleccionadoras pero esperanzadoras de la carta de San Pablo a los romanos. “La creación espera con gran impaciencia el momento en que se manifieste claramente que somos hijos de Dios. Porque la creación perdió su verdadera finalidad, no por su propia voluntad, sino porque Dios así lo había dispuesto; pero le quedaba siempre la esperanza de ser liberada de la esclavitud y la destrucción, para alcanzar la gloriosa libertad de los hijos de Dios. Sabemos que hasta ahora la creación entera se queja y sufre como una mujer con dolores de parto.” (Romanos 8: 19-23)

Obispo Joseph R. Kopacz

Hemos estado alguna vez quejándonos en estos días, mientras la pandemia avanza en muchos rincones de nuestra sociedad y el mundo; quejas por nuestros hijos, ya sea académicamente y desde el punto de vista de su desarrollo; o quejas por la pérdida de vidas y el sufrimiento que sobreviene con esto. Será necesaria una reconstrucción considerable.
La bendecida Madre Teresa comprendió bien la tarea de toda la vida, de construir una comunidad religiosa que sirva a las urgentes necesidades del momento presente y que perdure para las generaciones venideras en un mundo donde no hay garantías. En un poema atribuido a su autoría y titulado “De todos modos”, ella reflexionó, “Aquello que pasas años creando, otros lo pueden destruir de la noche a la mañana. Crea de todos modos.”
Claramente está diciendo que cuando sea necesario, reconstruya y cree algo mejor. Podemos aplicar su sabiduría a los impulsos destructivos inherentes a la humanidad o al poder abrumador de la naturaleza. Parece que dondequiera que miremos, demasiados están atrapados entre la espada y la pared, Escila y Caribdis, los bajíos rocosos o el remolino agitado.
Por un lado, está el poder destructivo de la naturaleza en el virus que acecha silenciosamente, en los incendios furiosos, en los huracanes aulladores, en las inundaciones imprevistas o en los terremotos. Por otro lado, la destrucción brota del abismo de la naturaleza humana, alienada de nuestro amoroso creador, en actos de violencia, terrorismo y guerra. Lo que una vez fue, ya no existe y la gente se ve presionada a elegir. O mira hacia adelante y reconstruye de una forma u otra o mira hacia atrás y se deja llevar por la inercia. El Libro de Eclesiastés nos recuerda que en el ciclo de la vida, “Un momento para destruir y un momento para construir.” (3: 3) Como hijos de Dios, queremos estar ocupados viviendo.
Este fin de semana es el vigésimo aniversario del 11 de septiembre que arrasó con muchas vidas, destruyó estructuras icónicas, causó estragos en la psique de nuestra nación y desató una guerra de 20 años cuyo final oficial sigue derramando sangre. De hecho, toda la creación gime. Sin embargo, esta crisis reveló de inmediato la bondad y el coraje de los socorristas y muchos otros que dejaron de lado la preocupación por sí mismos con la esperanza de rescatar a su vecino y al extraño. Se necesitaron 14 años para que el majestuoso One World Center se construyera en el lugar de las Torres Gemelas que fueron destruidas. Los que experimentaron directamente este horror tardarán toda una vida en sanar. Oramos para que la obra de reconciliación no cese nunca.
El Hijo de Dios, aquel a través de quien y para quien llegó a existir toda la creación, reveló la inevitable vulnerabilidad de la vida en el Calvario. Sin embargo, el Domingo de Resurrección, el amanecer de lo alto amaneció sobre nosotros, quienes caminamos en la sombra de la muerte y que ahora caminamos por fe, trabajando con un propósito todos los días de nuestra vida, porque Cristo vive.
En las grandes preguntas sobre nuestra vida y en nuestras tareas cotidianas y familiares, sepamos que, en Dios, nuestras vidas son un trabajo de amor, ya sea que estemos construyendo algo nuevo con gran confianza o reconstruyendo ante la pérdida. En el Prólogo de San Juan, sabemos de dónde viene el poder para recuperar nuestro equilibrio y nuestra esperanza. “En el principio ya existía la Palabra; y aquel que es la Palabra estaba con Dios y era Dios. Él estaba en el principio con Dios. Por medio de él, Dios hizo todas las cosas; nada de lo que existe fue hecho sin él. En él estaba la vida, y la vida era la luz de la humanidad. Esta luz brilla en las tinieblas, y las tinieblas no han podido apagarla”.